Luis Álvarez Angueira presentó la baja del BNG recientemente, “fai poucos días”, puntualizaron ayer fuentes del partido, y la organización la aceptó. La renuncia se entregó y se hizo efectiva después de que su sobrina política y edil de Igualdade en el Concello de Rianxo, Hadriana Ordóñez, presentase una denuncia acusándolo de haber abusado de ella cuando era menor de edad.
Fuentes del partido por el que Álvarez Angueira fue alcalde de Pontecesures durante doce años subrayan que “o BNG quere que se investigue o tema ata as últimas consecuencias”. Causar baja en el partido es habitualmente un proceso más lento, que empieza en el Consello Comarcal correspondiente. Comunicada la decisión, su responsable es el encargado de remitir a los “órganos nacionais” el parte de bajas acompañado de una copia del acta donde consta la aceptación y de la ficha de la persona, según figura en los Principios organizativos e Normas de fundamento del BNG.
Ordóñez pertenece también a la misma organización, que cierra filas en torno a ella. Así, desde el grupo municipal de Rianxo del que forma parte muestran su “total apoio persoal nunha situación difícil para ela”. Destacan que “imos apoiar a unha compañeira que deu un paso moi importante”, afirma el alcalde, Adolfo Muíños.
Álvarez Angueira, por su parte, negaba esta semana los hechos. Aseguraba que lo denunciado “é absolutamente falso, non é certo” y añadía que ya se puso en contacto con su abogado “para que se formulen as accións xudiciais oportunas a quen corresponda”.
Recurso aceptado
La titular del juzgado de Padrón que lleva el caso lo archivó en un primer momento porque el presunto delito habría prescrito, ya que los abusos sexuales se habrían cometido supuestamente entre los años 1996 y 2001, cuando la sobrina del denunciado tenía entre 11 y 16 años. Ahora decidió “dar un paso adiante para visibilizar estes temas, que isto non volva pasar”, explica Hadriana Ordóñez.
Después de que el juzgado no admitiese la querella, la representación legal de Ordóñez presentó recurso contra el archivo y la jueza lo estimó parcialmente, por lo que ha citado a declarar a la denunciante: “Se considera imprescindible escuchar a la víctima para poder conocer con detalle los hechos”, argumenta en su último escrito.
La magistrada escuchará el testimonio de la concelleira de Igualdade “por si de su relato se pudieran extraer otros datos no reflejados en la denuncia que permitirían calificar los hechos denunciados como un delito más grave y castigado con pena superior que el delito de abusos sexuales continuado que inicialmente se le ha imputado al investigado”. Considera que en la demanda “no es posible resumir los hechos ocurridos durante cinco años”.
Hadriana Ordóñez asegura que presentó la denuncia 21 años después de haber sufrido presuntamente abusos por parte de su tío político por primera vez “por se existiran outras nenas ou adolescentes que o viviran” y afirma convencida que “se a pesar do vivido isto serve para que outras familias estean alerta, pagou a pena”.