La comunidad escolar del IES Illa de Arousa considera que la Consellería de Educación no aportará el profesorado suficiente para mantener toda las actividades para una enseñanza de calidad. Así, su Asociación de Nais e Pais  (ANPA) inició este fin de semana una serie de movilizaciones con un encierro de a penas 24 horas en las que unas 30 personas –entre padres y alumnos– empapelaron el centro con pancartas reivindicativas, y que continuarán en los próximos días. Y esto no es todo, pues las carencias denunciadas evitaron que las clases empezaran ayer con normalidad.
El alumnado llegó a primera hora y en lugar de asistir a la habitual reunión informativa sobre horarios, tutorías, etc. La dirección del centro les entregó una hoja comunicándoles que las clases comenzarán en los próximos días “ante a imposibilidade de elaborar horarios, debido a que falta profesorado por asignar a este centro por parte da Consellería”.
Según la ANPA, a última hora el instituto recibió la confirmación de que este viernes llegará el docente para Planificación Centrada en la Persona (PCP) y está previsto que el curso pueda empezar mañana. “Teñen que reestruturar os horarios a distribución dos docentes, etc. E non lles daba tempo para mañá –por hoy–”, añadieron desde la asociación.

más movilizaciones
A pesar de contar un maestro más, los progenitores consideran que la situación es igualmente insostenible y continuarán protestando. “Seguiremos coas movilizacións, as pancartas e as camisetas reivindicativas para que a Xunta polo menos nos atenda porque estannos quitando dous profesores e medio, aínda que agora nos den un”, manifestaron desde la ANPA.
Las mismas fuentes afirmaron que la Consellería de Educación está realizando una “sangría” pues vienen perdiendo personal desde hace cuatro cursos. Siempre según los padres, en este tiempo pasaron de tener 27 docentes a 21, y creen que para el próximo quieren dejarlos con 19. De hecho, no es la primera vez que la comunidad educativa del Instituto Illa de Arousa se moviliza. El año pasado también protagonizaron actos de protesta como una toma de uvas de fin de año colectiva.