La familia Asorey detecta un “mercado negro” de copias fraudulentas de su obra

La familia Asorey detecta un “mercado negro” de copias fraudulentas de su obra
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Herederos del escultor Francisco Asorey han iniciado una batalla legal para acabar con lo que no dudan en calificar como un auténtico “mercado negro” de reproducciones “fraudulentas” de algunas de sus obras. Según su nieta Carmen, descendiente del único hijo vivo del cambadés, en la busca de trabajos de su abuelo para su catalogación, se están encontrando con copias y modificaciones realizadas al margen de la familia lo que supone una acción “ilegal” porque aún están vigentes los derechos de autor. La santiaguesa explicó que la legislación existente en este ámbito sufrió una modificación en 2006 que indica que tales derechos pasan a los herederos una vez fallecido el autor y perduran durante 70 años, y Asorey murió hace 52. “Las Meninas de Velázquez aparecen en pañuelos y otros productos pero sus derechos ya han expirado, en nuestro caso no”, puso como ejemplo.

 

engaño al comprador

Carmen Asorey indica que esto sucede tanto en moldes dejados por el artista como en originales. “Los propietarios –de estos– pueden tomar decisiones sobre ellos pero no pueden hacer negocio. Si lo venden deben informar a la familia de cuándo y a quién”, añadió. También quieren acabar con esta práctica porque “además se engaña al comprador. Es una copia fraudulenta, podemos exigir su destrucción”.

Con tal objetivo han contratado los servicios de un abogado y tienen pistas sobre qué empresa podría estar detrás de algunos casos cuya identidad no van a desvelar, de momento. “Su primera reacción ha sido negarlo pero sabemos que estamos en lo cierto. Mi padre vive y se acuerda de las cosas”, declaró.

La nieta del célebre artista asegura que están dispuestos a llegar hasta el final en la defensa de sus derechos como herederos, aunque reconoce la dificultad porque se trata de obras de los años 30. De hecho, recientemente crearon una asociación sin ánimo de lucro que además, pretende catalogar toda su obra y promover la recuperación de algunas en estado de deterioro. “No es una figura conocida, no ha llegado al público, no sé porqué razones, pero por ello, tomamos las riendas en la medida de nuestras posibilidades y a costa de nuestro tiempo y dinero. Si luego llegan las subvenciones, bienvenidas sean”, agregó al respecto. También cuentan con una página web donde van informando de las novedades y las piezas inéditas encontradas, así como bocetos (cedidos por el Museo do Pobo Galego), entre otras cosas, como las iniciativas planteadas a diferentes administraciones para la restauración de piezas como la que se hará al “San Francisco”, en Santiago.

La familia Asorey detecta un “mercado negro” de copias fraudulentas de su obra

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