En Rubiáns son muy conscientes de que la enseñanza no solo se limita a los libros y a las aulas, sino también a la vida que ocurre más allá de las paredes del centro educativo. Prácticamente cada semana los pequeños de este centro de Primaria e Infantil tienen una visita muy especial a su clase. Durante todo el curso están trabajando con la temática del mar, con iniciativas y propuestas que abarcan tanto las horas lectivas como las actividades puramente extraescolares.
Sin embargo estas enseñanzas extraordinarias van mucho más allá. Si el jueves los pequeños aprendían los buenos hábitos alimenticios con bocadillos de primer nivel para la hora del recreo, ayer se lo pasaban en grande con los efectivos del Seprona.
Los agentes del Servicio de Protección de la Naturaleza, vinculado a la Guardia Civil, desembarcaron en Rubiáns para explicarles a los pequeños en qué consiste su trabajo. Lo hicieron con los vehículos que habitualmente utilizan para sus funciones, lo que hizo la delicia de los más pequeños. Fue precisamente esta parte más práctica la que convenció a más de uno sobre la posibilidad de ser, de mayor, agente del Seprona.
Todavía queda mucho de curso escolar y en Rubiáns tienen preparada una retahíla de actividades diversas.