Una lección escrita con pictogramas. Eso es lo que aprendieron ayer los asistentes a la Festa dos Maios, que se celebró en A Peixería ante unas previsiones nada halagüeñas y un tiempo de todo menos estable. Fueron seis los centros educativos que participaron en una edición poco concurrida pero en la que el espíritu reivindicativo y la originalidad estuvieron más presentes que nunca.
El amarillo del tojo y el verde del hinojo fueron solo dos de los colores que inundaron el emblemático edificio, mientras que las risas de los pequeños pusieron el sonido de una jornada que no se quisieron perder, entre otros, los concejales de Cultura y Turismo, Francisco González y Manuel Tarrío (que acudió también como padre).
La fiesta comenzó a las doce del mediodía y fueron cuatro los grupos de niños que se subieron al escenario para cantar unas coplillas en las que Rajoy, Feijóo, los recortes y la austeridad, fueron, como no podía ser de otra manera en estos tiempos, los grandes protagonistas. Vagalume, Rubiáns, San Francisco y Os Mecos fueron los colegios que presentaron coplas a una fiesta en la que, desde hace años, ya no se conceden premios.
La reivindicación que llevó la ANPA del colegio de BATA a la Praza da Peixería fue doble. Y es que en un folleto escrito con pictogramas (signos que se utilizan en el aprendizaje de los niños que padecen un trastorno del espectro autista) los padres de Os Mecos reivindicaron más ayudas de las administraciones públicas y denunciaron los recortes que vienen sufriendo en los últimos años. Por el resto, los “maios” destacaron un año más por su variedad. Desde un circo, hasta abejas y caracoles, pasando por una gamela (con el logotipo de la escuela infantil Galiña Azul) o una paleta de pintor, un hórreo o un piano (que fue el que más llamó la atención de los niños). Esas fueron algunas de las composiciones florales que se pudieron ver en A Peixería, donde en cifras, se congregaron un total de 21 “maios”. Al final de la fiesta, todos disfrutaron de un rico premio: Un pedazo de rosca. n