La jornada más terrorífica del año se vivió ayer por todo lo alto en diferentes puntos de la Ría de Arousa. Y es que poco a poco la tradición del Samaín – o lo que para muchos es simplemente el Halloween– se ha ido incorporando al calendario festivo arousano. Así pues el tiempo –al contrario de lo que ocurrió hace justo un año– permitió que saliese a la calle uno de los eventos más vistosos cada año por estas fechas: la procesión de As Caveiras de Catoira. Una cita multitudinaria que cada año va ganando en adeptos y que recorre parte del centro urbano para delicia de grandes y pequeños. Una de las grandes novedades de este año es la gran calabaza gigante confeccionada con globos que encabezó la procesión y que iluminó al resto de la comitiva. Disfraces de lo más terroríficos y calabazas fueron los protagonistas de la comitiva. En Vilagarcía hubo una gran fiesta en la Praza da Peixería con talleres de lo más diversos.
No fue solo la celebración en Catoira, dado que el Samaín se vivió también ayer en celebraciones en A Illa de Arousa, Meaño y Ribadumia. En la localidad insular, se recuperó el desfile de disfraces de terror, uno de los primeros en organizarse históricamente en la comarca y siempre lleno de originalidad.
La cita partió del entorno de la Casa Consistorial, contó con buena afluencia y terminó con una chocolatada y animación.
En Ribadumia, el centro social de Barrantes acogió una tarde de Samaín promovida por la Agrupación Músico-Cultural. Esta incluyó concursos de disfraces y de dulces típicos, además de una vistosa procesión de “santa compaña”, chocolatada y DJ.
En Meaño, la fiesta ayer fue en Xil. Su pabellón de deportes albergó toda la tarde una celebración con esta misma temática, pensada especialmente para niños de hasta catorce años de edad. Hubo atracciones hinchables, maquillaje, merienda y disfraces de lo más vistosos.
La comarca de O Salnés programa para los próximos días más citas lúdicas, de magosto, como la del domingo 6 en el centro social de Dena.