Las ganas que tenía el Sigaltec de vencer al Porriño en casa no pudieron cumplirse, cerrando el marcador con un 61-77. Un rival veterano que llegaba a Fontecarmoa 1 con bajas, pero con su quintento de garantías. 

“Estábamos con muchas ganas, pero nos falló la ansiedad por querer ganar pronto y acabamos fallando tiros cómodos”, destaca Luis Gabín, entrenador de la zaga vilagarciana. Por otro lado, las protestas que se desencadenaron durante el duelo sacaron un poco del partido a los locales. “En estas situaciones ellos son un equipo más veterano y saben gestionarlo mejor”, indica Gabín. El Porriño supo aprovechar los errores del rival, reduciendo los espacios en ataque.

“O metíamos desde fuera o nos costaba una barbaridad encestar. Sabíamos que iba a ser un rival durísimo pero tomamos, al menos, tres decisiones extrañas”, lamenta el técnico. “Sabemos que esto está empezando, no podemos volvernos locos ni por ganar ni por perder, ahora toca pensar en el Rosalía, en el que va a ser clave el juego de transición”, recalca Gabín. Para el próximo encuentro será clave la atención a la pérdida de balones, al igual que manejar al contraataque.