El Arosa afronta el derbi de este sábado ante el Boiro (18 horas) con problemas en defensa. A la baja por lesión de Luis Castro se le suma la de Mario García, que debe cumplir un partido de sanción por ciclo de cinco amarillas. Así las cosas, Míchel Alonso se queda sin los dos jugadores que han actuado en la posición de lateral izquierdo hasta la fecha. Al entrenador ferrolano se le plantea un dilema debido a estas ausencias.
Puede adaptar a otro jugador a esa posición, bien un defensa central o un centrocampista de banda, o cambiar el sistema y pasar a jugar con tres centrales y carrileros, igualando la estructura que seguramente presentará el Boiro. El Arosa se ha manejado en estas primeras quince jornadas con línea de cuatro atrás, pero ahora las circunstancias le pueden obligar a cambiar, bien de inicio o a medida que discurra el derbi.
El equipo de Míchel Alonso empieza a tener una asignatura pendiente a nivel defensivo. Ha encajado en sus últimos cuatro encuentros en errores individuales. En dos de estos partidos, los disputados en A Lomba, se adelantó en la primera parte y vio como sus rivales le remontaban en la segunda. Al Arosa le falta seguridad y solvencia defensiva. De ahí que pese a sus 29 goles a favor, le esté costando llegar a la cima de la clasificación.
Pendientes de Duque
El Arosa inició los trámites para dar de alta la ficha del atacante Miguel Ágel Duque, que lleva desde septiembre entrenando con el grupo pero sin poder jugar por un problema administrativo tras su paso en verano por el fútbol australiano. Abierto el plazo para inscribir jugadores en el mercado invernal, el club vilagarciano ya ha enviado la documentación pertinente para darlo de alta en la Federación Gallega, pero falta que llegue el transfer para que su licencia esté operativa de nuevo. Su debut, por tanto, puede que tenga que esperar a la próxima semana en Cangas.