El Arosa no pudo despedir el año con victoria en A Lomba, y es que los arlequinados sellaron un 2-2 ante el Silva SD. Un encuentro en el que los locales brillaron durante los primeros 45 minutos, pero que pagaron muy caro la desconexión en la segunda mitad, en la que los visitantes remontaron el partido en a penas un minuto, tras dos garrafales errores defensivos quie abrieron espacios a Parafita y Antonio López.
Míchel Alonso realizó algunos cambios respecto al once titular que jugó en A Estrada, apostando por Rivera, Concheiro y Javi Rey como grandes novedades. En cuanto a las líneas defensivas, el técnico cumplió con lo esperado, con una defensa de cuatro en la que Torrado dominaría el lateral derecho, Pacheco y Santos el centro de la zaga, y Mario García la banda izquierda. La sala de máquinas quedaba a los mandos de Concheiro, Javi Rey y Martín Diz, apoyados en punta por Iñaki y con Rivera y Compa como grandes referencias en el último tercio del campo.
Durante los primeros minutos del encuentro, el Arosa fue claramente superior en la transición de balón, a la vez que Rivera dominaba la parte atacante. La ocasión más clara para los arlequinados llegó en el minuto diez, cuando Iñaki Martínez, tras un pase de Carlos Torrado, disparó a la portería de David, que terminó realizando una gran parada.
El Silva a penas conseguía llegar al área de Álex Vila, mientras que la presión incesante del Arosa apabullaba a los de A Coruña. Torrado se adueñaba de las transiciones de balón del cuadro local, convirtiéndose en una figura destacada durante el inicio del partido.
Por su parte, el Silva planteaba un partido de resistencia física, buscando los pocos espacios que podían encontrar en campo rival, pero sobre todo, centrados en impedir la transición del esférico en el último tercio del campo. Los visitantes buscaban las acciones a balón parado para hacerse con el balón, pero la posesión del balón seguía en los pies de los arlequinados.
En el ecuador de la primera mitad, Iñaki Martínez tuvo una clara ocasión tras un córner, pero el disparo del mexicano acabaría siendo atajado por el arquero visitante. A pesar de que se hizo de rogar, la recompensa al buen trabajo llegaría para los de Míchel.
En el 32, Rivera recibió un centro lateral que enchufaría directamente desde el área pequeña, rematando de primeras y batiendo así a David. Minutos después del primer gol del partido, llegó la polémica. Un agarrón en el área sobre Compa, en el que el colegiado no señaló nada. Carro se desesperaba ante la actuación divina de Torrado, que superaba a todo el que se interpusiese en su banda.
Parafita intentó empatar el encuentro con un intento de chilena que terminó recibiendo Carro con un disparo a la escuadra que se iría por encima de los palos de la portería de Álex Vila. Los locales no concedieron más ocasiones antes del descanso, si no que Compa llegó a tener la oportunidad de anotar el segundo, con un disparo desde la media luna que acabó salvando el portero del cuadro coruñés. Así, el encuentro se fue al descanso con el 1-0 en el electrónico.
En el segundo tiempo, Míchel continuó apostando por los mismos jugadores de inicio, mientras que Iván Sánchez mandaba calentar a los suyos con el objetivo de dinamizar el encuentro y lograr remontar el resultado. Los arlequinados no bajaron los brazos, a pesar de que los visitantes aumentaron su presencia en el área de Álex Vila. La actuación arbitral volvía a cobrar protagonismo, con una mano de favorable al Arosa no señalada.
La desesperación comenzaba a ser palpable en las filas visitantes, y es que Parafita no lograba encontrar espacios en las bandas, mientras que Melo trataba de filtrar el pase perfecto. La insistencia de los visitantes terminó encontrando el empate. Los centrales dejaron un espacio que Antonio López aprovechó para disparar, despistando a Álex Vila.
Las puertas del manicomio parecieron abrirse, cuando un minuto más tarde, en el 57, Parafita volvía a encontrar otro espacio, disparando desde fuera del área y enchufando el 1-2 que nadie se podría imaginar ante el elevado nivel que mostró el Arosa durante más de 45 minutos. Así, la desesperación cambió de bando en cuestión de segundos, con dos errores defensivos que salieron muy caros a los arlequinados, incapaces de reaccionar ante el tsunami coruñés.
Parafita movía a su antojo a Concheiro y Javi Rey. Ante la evidente merma física de los arlequinados, Míchel comenzó a mover el banquillo. Abandonaron el terreno Concheiro, Rivera e Iñaki Martínez para dar paso a Felipe Peredo, Romay y Javi Pereira.
Los visitantes recibieron una dosis de adrenalina tras la apoteósica remontada, por lo que seguían apretando en busca de hacer sangre en la herida abierta de los arlequinados. Los de Míchel buscaban salir al contragolpe, a la espera de romper las líneas defensivas visitantes.
La ocasión más clara para empatar el partido la tuvo Javi Pereira, en un intento de remate de cabeza. El encuentro se mantuvo parado durante unos minutos, ya que tuvieron que intervenir los servicios médicos del Silva SD para asistir a Alonso. Carro seguía peleando por la banda de Torrado para llegar al área, pero no superaba al arlequinado. Los de Iván Sánchez buscaban transicionar con balones largos, impidiendo las llegadas del Arosa al área.
Los locales no conseguían robar balones, y a punto estuvo de llegar el 1-3 ante un remate de Zoubir que terminó despejando Álex Vila. El ambiente comenzó a caldearse en las gradas después de que distintos jugadores del Silva se tirasen al suelo, parando así el juego. Mientras tanto, Martín Diz buscaba la manera de subir a la contra por la banda, pero los visitantes se atrincheraban.
El encuentro se mostraba cada vez más parado, con acciones que frenaban el juego de manera constante, por lo que los arlequinados tampoco conseguían volver a enchufarse en la dinámica del partido. Los visitantes lograron tomar la medida a un Arosa que no se atrevía a abrir hacia la banda derecha. Casi en el último suspiro, un remate de Romay puso el 2-2 en A Lomba. A pesar de que en los últimos minutos los locales tuvieron más presencia en el área, no fue suficiente para sumar los tres puntos en casa antes del parón de navidad.