La Shine Brows es una técnica creada en Shine, un atelier de belleza en A Coruña ubicado en el número 8 de la calle Marcial del Adalid. El tratamiento consiste en recuperar la forma y la densidad de las cejas con total naturalidad, ajustando la simetría y valorando todavía más la mirada. El proceso se realiza en la capa superficial de la piel, implicando un estímulo para la aparición de nuevos pelos y fortaleciendo así los ya existentes.
Las Shine Brows se aplican con la misma técnica que el microblading -se trata de pequeñas microperforaciones que depositan pigmento en la epidermis a modo semipermanente, imitando al pelo- pero a diferencia de esta técnica, con la Shine Brows el cambio es inmediato. “La clienta ya sabe del atelier con el pelo de la ceja del color perfecto, con otra mirada y con el rostro rejuvenecido. Yo creo que el éxito de esta técnica está en la inmediatez del resultado y a su vez, en su extrema naturalidad, que es lo que su público está buscando”, afirma Vanessa Leao.
Para evitar el acabado artificial del microblading, Vanessa Leão desarrolló una técnica personalizada para sus clientas. Para conseguir una ceja natural, hay que estudiar previamente los rasgos del rostro, el nacimiento del pelo, la textura o el color, imitando el movimiento del vello propio, logrando que parezca que es pelo nuevo lo que está creciendo.
Para personalizar al máximo el color diseña una tonalidad para cada cliente: “Utilizamos los pigmentos semipermanentes más seguros para usar en la piel. Con el tiempo, estos pigmentos se desvanecerán a medida que el cuerpo los absorba y desaparecerán naturalmente. La micropigmentación atinge una capa más profunda de la piel y genera un tatuaje que no se va de la piel en años y va cambiando de color con el tiempo”, destaca la profesional.
Para que Vanessa pueda transformar la mirada de la clienta se debe de pedir cita previa o incluso enviarle fotos de las cejas en la actualidad y en el pasado. En algunas ocasiones, las clientas deben realizar alguna sesión de láser para eliminar pigmentos indeseados en las cejas antes de comenzar el tratamiento. Además, las pinzas de depilación deberán dejarse apartadas durante unas 4 o 6 semanas.
Una vez que se haya realizado el estudio de la ceja y se obtenga un pigmento muy similar al vello de la clienta, la especialista comienza a dibujar uno a uno los pelos de la ceja. A pesar de que los resultados son instantáneos, es necesario acudir a una segunda cita cuatro semanas después para ver como evoluciona la cicatrización y valorar si es necesario realizar algún retoque.
“Este verano hemos atendido en el atelier a clientas de Alemania, Suiza, México, Francia, e Inglaterra, además de nuestras clientas habituales de Galicia. Lo que más nos ha sorprendido, sin lugar a dudas, es que nos han encontrado a través de las redes sociales, en especial por Instagram. Se pusieron en contacto para pedir más información y a partir de ahí ya concretaron sus citas. Se puede tener unas cejas con forma y volumen adecuados para realzar la belleza del rostro a partir de 400€, teniendo en cuenta la cita previa, el tratamiento y la cita del mes”, destaca Vanessa.
La duración de las Shine Brows oscila entre 8 y 12 meses, aunque siempre dependerá del tipo de piel de cada cliente, de sus hábitos de vida y de los cuidados post tratamiento: no sudar ni practicar deporte en la primera semana, evitar el calor del secador y de la ducha, evitar el uso de ácidos las semanas previas y posteriores al tratamiento y evitar el sol.