El Ayuntamiento de Ribeira adjudicó el proyecto de rehabilitación y mejora de la eficiencia energética de la Casa Consistorial, con actuaciones sobre la envolvente exterior, a la empresa Xestión Ambiental de Contratas SL por 2.245.775 euros, lo que supuso una rebaja de 96.013 euros (4,1 %) respecto al presupuesto base por el que salió a contratación a comienzo del pasado mes de julio de 2.341.788 euros. El importe por el que se sacó a licitación fue sensiblemente inferior a los 2.836.394 euros, con cargo al Programa de Impulso a la Rehabilitación de Edificios Públicos (Pirep) que, a finales de noviembre de 2022, anunció el entonces delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, en la visita que hizo a la ciudad. A ese importe habría que añadir 751.645 euros de las arcas municipales para completar el presupuesto total de la obra inicialmente prevista, de 3.588.039 euros. También se reducía el plazo de ejecución de 22 a 10 meses.
La obra contempla, entre otras intervenciones, la construcción de una galería de vidrio perimetral, a modo de una fachada activa de doble piel. Esa nueva galería se diseñó de modo que pueda tener un comportamiento variable según las distintas estaciones del año, pues en invierno acumulará el calor producido por la radiación solar, aprovechando ese efecto invernadero para calentar los espacios interiores, mientras que en verano se comportará como una chimenea de ventilación natural, generando una corriente de aire que produce su enfriamiento. “Temos un rol esencial que desempeñar na loita contra o cambio climático e a preservación dos recursos naturais. Por iso o proxecto de renovación do edificio do Concello é vital para reducir o noso consumo de enerxía e minimizar a pegada de carbono”, dijo el alcalde, Luis Pérez.
Este proyecto, financiado con fondos procedentes del Instrumento Europeo de Recuperación, estaba previsto que se ejecutase en un plazo máximo de 10 meses, tal y como se recogía en las bases de la licitación, pero la oferta de la empresa adjudicataria lo redujo en sesenta días. El proceso para esta contratación se realizó mediante negociado sin publicidad, con invitación a cinco empresas, de las que tres presentaron ofertas, una de las cuales quedó excluida debido a que, pese a que respondió presentando documentación para justificar su oferta considerada anormalmente baja -de 147.064 euros menos que el precio de licitación (-6,28%)- no lo hizo debidamente en base a los motivos recogidos en el pliego de cláusulas administrativas. La segunda empresa que aún seguía en el proceso presentó una oferta económica de 2.306.692 euros, lo que suponía una rebaja de 35.096 euros, lo que suponía casi el 1,5% de reducción. Ello fue determinante en la resolución de este proceso, y su puntuación global fuera de 18,35, frente a los 21,38 de la que finalmente resultó adjudicataria.