Modernizar el polígono industrial de Espiñeira y mejorar su seguridad y de su entorno. Esos son los objetivos principales que persiguen el Ayuntamiento de Boiro y la entidad urbanística y de conservación de dicho recinto empresarial. Por un lado, ambas entidades consensuaron las actuaciones que, con cargo a la nueva línea de ayudas de la Consellería de Industria para la mejora de las infraestructuras de los parques empresariales gallegos, dotada con tres millones de euros, se contempla la dotación de cargadores para que sus trabajadores con vehículos eléctricos puedan abastecerlos de esa energía, y de una pantalla digital que funcionará por control remoto y se instalará en la entrada al polígono para facilitar información útil a quienes accedan a ese recinto. Además, se asfaltarán los dos aparcamientos disuasorios recientemente habilitados y la señalización viaria de la fase 2.
Así lo dio a conocer el alcalde boirense, José Ramón Romero, junto al presidente de la referida entidad, Santiago Hermida, en la visita que realizó ayer la delegada de la Xunta en A Coruña, Belén do Campo, en la visita que realizó al polígono industrial de Espiñeira junto al director territorial de la Consellería de Economía e Industria, Isidoro Martínez. La representante del Ejecutivo gallego pudo conocer las actuaciones realizadas, con apoyo de la Xunta de un total de casi 106.000 euros, que permitió la instalación de un sistema de seguridad gracias a una subvención superior a los 46.000 euros, y la mejora de sus infraestructuras viarias con otra de casi 60.000 euros, con la que se renovó un vial secundario de 680 metros lineales del parque empresarial, pavimentando las aceras que quedaron sin ejecutar en anteriores actuaciones y el saneamiento de diversos tramos deteriorados.
Durante el encuentro que mantuivieron con al delegada de la Xunta y con el director territorial de la Consellería de Economía e Industria,representantes municipales y de la referida entidad del parque empresarial boirense solicitaron la realización de otrtas obras que se encuentran fuera del ámbito del recinto industrial de Espiñeira, pero que le afectan directamente, como son los accesos, pues consideraron que representan un peligro sobre todo por vehículos pesados que entran y salen todos los días de dicho polígono. Así, entre esas demandas, Santiago Hermida solicitó la mejora de la seguridad vial en el acceso al polígono, teniendo en cuenta que son muchos trabajadores los que acuden andando a sus fábricas y el paso por el puente sobre la AG-11 supone un elevado riesgo de atropello. Do Campo indicó que esa actuación deberá tramitarse ante la Consellería de Vivenda e Planificación de Infraestruturas.
Do Campo explicó que esta línea de ayudas “contribúe a apoiar aos concellos galegos e pretende ser, ademais, un impulso para a captación de investimentos en Galicia e para mellorar a competitividade das nosas empresas”. La delegada afirmó que con la referida nueva línea de ayudas, cuya convocatoria sigue abierta hasta el 7 de marzo, “queremos seguir dando resposta ás novas necesidades que teñen estas instalacións para modernizalas e ofrecer un mellor servizo para favorecer a fixación e implantación de compañías e promover o emprego local”. Aclaró que esas subvenciones tienen una “intensidade do 80% ata un límite máximo de 120.000 euros nos caso de solicitudes individuais e de 138.000 no caso de que sexan conxuntas”. Y agregó que se prevén anticipos de hasta el 25% del importe de la ayuda concedida.