La patrullera “Mar de Galicia” del Servizo de Gardacostas, que estaba realizando labores de vigilancia e inspección por las zonas de Aguiño, Palmeira e Illote Areoso, en el entorno de Ribeira, llevó a cabo en la mañana de este pasado domingo el decomiso de una embarcación de poliéster de la séptima lista, de recreo y uso particular, y un motor Yamaha de 25 caballos de potencia, que ayer acudió a recogerlo un camión para su transporte hasta una nave de la Xunta para su depósito. Además, se decomisaron prendas y aperos utilizados para faenar en el mar.
Igualmente, según reveló ayer la Consellería do Mar tras las consultas realizadas por este periódico, se levantaron varias actas, una de ellas por una presunta infracción a la Lei de Pesca de Galicia y otras tres de comiso a desconocido. Ese operativo también supuso la incautación de cerca de 70 kilos de marisco que llevaba a bordo la referida lancha, que no cuenta con autorización para faenar, y en la que iban dos tripulantes, que, al parecer, son de la vecina localidad de A Pobra, y uno de ellos es un viejo conocido de los inspectores o agentes vigilantes de Gardacostas. Según indicó el departamento que dirige Alfonso Villares, concretamente les fueron decomisados 57 kilos de centolla, 11,2 kilos de nécoras y un kilo de lubrigante. Todas estas especies pudieron ser devueltas al mar, con la excepción del lubrigante, que estaba muerto y que fue entregado a un centro benéfico de la comarca.
Esta intervención por parte del personal de del buque “Mar de Galicia” permitió también la incautación de siete viveros que estaban sin identificar, cinco de ellos con nécora y los otros dos con centolla, así como siete nasas de pulpo que tampoco tenían identificación alguna. Así lo confirmó la Consellería do Mar después de que trascendió esa intervención del Servizo de Gardacostas. Igualmente, en torno a la una de la tarde de este domingo se llevó a cabo un importante despliegue de policías locales y nacionales en el puerto ribeirense para garantizar la seguridad en las labores de los inspectores y agentes vigilantes, especialmente en el momento en el que llegó al muelle de la capital barbanzana una lancha semirrígida auxiliar del “Mar de Galicia” con la que fue remolcada la planeadora que fue decomisada junto con su motor fueraborda.