Los vendedores ambulantes que acuden cada sábado al mercadillo que se desarrolla en el relleno portuario de Ribeira recibieron una nota informativa, que les cayó como un jarro de agua fría, pues se les comunicó que ese evento no se celebrará el próximo sábado, 22 de julio, por la coincidencia con la Festa da Dorna. Todo apunta a que se va a instalar a la altura del cruce de los semáforos, junto el puesto de churros, un gran escenario que ocupa todo el ancho de la Avenida do Malecón, y que el tráfico será desviado por el relleno portuario, en donde se desarrolla el mercadillo.
De esa manera, se suma a la cancelación del que ya preveían que no se iba a desarrollar del 5 de agosto, por estar la ciudad en sus fiestas de verano y que, a la espera de confirmación oficial, se van a instalar las atracciones y puestos de los feriantes. Esta notificación la recibieron los vendedores ambulantes como un jarro de agua fría, pues señalaron que se les va a impedir trabajar en los dos mejores días del año del mercadillo de la capital barbanzana.
Tino Campos, que regenta un puesto de frutas, manifestó que la cancelación del mercadillo del próximo sábado le parece “unha crueldade”, pues señala que la medida que les comunicaron supondrá que perderán dos días de trabajo. “O sábado das Festas do Verán pode entenderse porque está ocupado históricamente polas barracas dos feirantes, pero non é comprensible que nos quiten este vindeiro sábado pola Festa da Dorna, algo que nunca sucedeu nos 35 anos que levo vindo aquí e o fan agora”, precisó Campos. “No inverno o único que facemos é aguantar o vento e a auga, pero agora no verán, que é cando hai os mellores mercados, nos fan isto. Pedimos que miren as cousas antes de facelas e darlle vida ao pobo e ao mercadiño, pois somos traballadores e pagamos por vir, non é gratis”, agregó.
Por su parte, Mauricio Camacho, ambulante del sector textil, manifestó que están “indignados”, pues insistió en que llevan todos los años aguantando los duros inviernos a que lleguen estos días de verano, que es cuando más trabajan y venden y “ahora nos quitan los mejores mercados”. Por eso, le pide al alcalde que busque una solución para que puedan instalar sus puestos ambulante el próximo sábado. “Tienen una semana por delante para buscar alternativas. La ciudad tiene muchos sitios para colocarnos y poder trabajar todos. Que se celebren esos mercadillos sería muy bueno para Ribeira, sus tiendas y hostelería”, concluyó Camacho.