El acto contó con la participación de la conselleira de Medio Ambiente e Cambio Climático, Ángeles Vázquez Mejuto; la directora xeral de Patrimonio Natural, Marisol Díaz; el director conservador del Parque Nacional Marítimo-Terrestre das Illas Atlánticas de Galicia, José Antonio Fernández Bouzas; el jefe de servicio de Parques Naturales de Galicia, Antonio Rodríguez; los concejales ribeirenses Francisco Suárez-Puerta, Herminia Pouso Maneiro y Víctor Reiriz Lampón,además de Xoán España, director general de Amicos, quien destacó la importancia de estas iniciativas para la conservación del patrimonio natural y la educación ambiental. Esta jornada incluyó la realización de una ruta circular de unos dos kilómetros por las pasarelas de madera de O Vilar, con explicaciones a cargo del personal del parque natural de Corrubedo, y que incluyó paradas en el mirador de la mina de wolframio, en la Fonte Pipín, en el aparcamiento de O Vilar y en la parcela de regeneración junto el Centro de Recepciçon de visitantes o "Casa da Costa".

Trabajo y dedicación

Ángeles Vázquez puso en valor el esfuerzo del personal de la Xunta de Galicia para “protexer, preservar e impulsar” la riqueza ambiental de los espacios naturales protegidos de la comunidad autónoma. La conselleira destacó el trabajo y dedicación de los agentes, vigilantes y profesionales de su departamento en el "coidado do noso patrimonio natural” y subrayó la "importancia de celebrar encontros deste tipo nos que “intercambiar experiencias e coñecementos”. Por ello, incidió en el papel fundamental que tiene la biodiversidad a la hora de mejorar la resiliencia de la región ante el cambio climático. De hecho, el Día Mundial del Medio Ambiente se centra en la restauración de las tierras y en la resiliencia frente a la sequía y la desertificación bajo el lema "As nosas terras. O noso futuro. Somos a Xeración Restauración". En esa línea, la representante autonómica recordó el trabajo que se viene realizando desde el Ejecutivo gallego de cara a garantizar la conservación de su biodiversidad y hacer compatible esa preservación con un uso público sostenible.

Vázquez recordó que el 42% del territorio gallego está amparado por alguna figura de protección y que tanto el Parque Nacional Marítimo-Terrestre das Illas Atlánticas de Galicia como los seis parques naturales -Fragas do Eume, O Invernadeiro, Baixa Limia-Serra do Xurés, Serra da Enciña da Lastra, Monte Aloia y el Complexo Dunar de Corrubedo e Lagoas de Carregal e Vixán- cuentan con un plan de uso y gestión propio adaptado a sus características y necesidades. Detalló que esos siete espacios protegidos, repartidos por 19 municipios, suponen una superficie total cercana a las 58.000 hectáreas en las que hay más de 400 kilómetros de rutas que se pueden recorrer a pie o en bicicleta. A mayores, Galicia cuenta con siete reservas de la biosfera, ocho monumentos naturales, seis humedales protegidos, dos paisajes protegidos, 59 zonas de especial protección (ZEC), 16 zonas de especial protección para las aves (ZEPA), 12 espacios naturales de interés local (ENIL), dos espacios privados de interés natural (EPIN) y dos geoparques mundiales. Además, la conselleira destacó que el 12% de la superficie gallega -355.000 hectáreas- está incluida en la Red Natura 2000, lo que sitúa a Galicia en la media de las regiones atlánticas, que está entre el 10% y el 15%.

Aumento de visitantes

Más en detalle, tras destacar que el número de visitantes al Parque Natural Complexo Dunar de Corrubedo e Lagoas de Carregal e Vixán aumentó en un 13,5% el año pasado con respecto al 2022,  Vázquez Mejuto puso en valor el trabajo llevado a cabo en este espacio protegido como ejemplo de proyectos que están obteniendo buenos resultados en el objetivo de conservar la riqueza ambiental de estos entornos Entre otras actuaciones, destacó la reintroducción de la "Iberdores Litoralis" -conocida comúnmente como "embigueira das praias"-, una especie incluida en el Catálogo Galego de Especies Ameazadas que, con la colaboración de la Universidade de Santiago de Compostela, ha vuelto a estar presente en este espacio natural y, de hecho, esta planta ya vegeta de forma natural a través de semillas que crecieron en el propio hábitat y no a partir de las anteriormente reintroducidas. Y, además de continuar con las actuaciones de control y erradicación de especies arbóreas que alteraban el hábitat propio del sistema dunar, desde el año 2021 se trabaja en el cartografiado de la duna gris de Corrubedo para conocer su evolución real con el paso del tiempo. A través de este proyecto, que incluye el uso de drones, se consiguió diseñar un gemelo digital de este espacio que ayudará a conocer futuras comportamientos del conjunto gracias a los levantamientos topográficos que se vayan realizando.