La instalación de una antena de telefonía móvil de 43 metros de altura en Palmeira desató la preocupación vecinal. Desde el Ayuntamiento indican que la obra se inició sin tener todos los permisos sectoriales requeridos, incluidos los de Industria, generó el rechazo de los residentes, que temen consecuencias para su calidad de vida y el impacto visual de esa estructura en el entorno. Ante el inicio de los trabajos, los vecinos informaron al gobierno local, “que actuou con rapidez e decidiu paralizar a obra, exercendo a súa responsabilidade para garantir que as actuacións se axusten á normativa vixente”.
El alcalde, acompañado por varios concejales, visitó la zona afectada para escuchar a los vecinos. Luis Pérez explicó con detalle los aspectos técnicos de la actuación y mostró el apoyo a la demanda vecinal de trasladar la antena a otro emplazamiento que cause un menor impacto en las viviendas próximas. Además, el primer edil informó a los asistentes de que ya habló con el responsable de la empresa encargada de la instalación de la antena para abrir negociaciones a través de las que acordar el cambio de localización de la estructura.
Así, Pérez Barral dijo que esa compañía se comprometió con él a no retomar las obras hasta que no se vean alternativas a la localización propuesta. Por ello, desde el Concello animan a los vecinos a colaborar con al Administración Local identificando parcelas alternativas en la zona, pero lejos de las viviendas, que puedan dar cabida a la referida antena sn perjudicar a los residentes.