Ribeira luce desde ayer en la Praza Xoán Fernández un banco elaborado con plásticos 100% reciclados y procedentes de residuos marinos. Así se suma en esta iniciativa a localidades como Llanes, Muros, Bueu, Punta del Moral-Ayamonte, Isla Cristina, Punta Umbría, Marbella, Caleta de Vélez, Almería, Carboneras, Garrucha, Andratx, Puerto de la Restinga, Santoña y a la portuguesa de Horta, en las Azores, y a dos enclaves tierra adentro, San Martín de Valdeiglesias y Sevilla, donde se retiraron residuos abandonados para prevenir su llegada al mar.
Esta acción, que forma parte de Mares Circulares, el proyecto más ambicioso de Coca Cola para la limpieza de costas y fondos marinos, sensibilización ciudadana y desarrollo de la economía circular, ya cuenta con 19 bancos fabricados artesanalmente con plástico reciclado, del cual un mínimo del 30% procede de la basura marina recogida por los más de 500 pescadores de 122 barcos en puertos españoles que participan en el proyecto, que se desarrolla conjuntamente con la Asociación Vertidos Cero. Cada banco tiene un máximo de 2,67 metros de longitud y un ancho de 45 centímetros, su color es azul-verdoso, reflejo de los residuos de que está hecho, su forma evoca el oleaje marino, su estructura es de acero inoxidable y sus tablas compuestas por plásticos reciclados.
Colaboración
La instalación del banco de Ribeira es un gesto de agradecimiento a los pescadores, como los de la Sociedad Cooperativa Gallega del Mar Santa Eugenia-OPP83 y la Asociación de Armadores de Ribeira, que participaron como voluntarios al recoger y transportar la basura marina que se adhirió a sus redes o la hallaron flotando. El alcalde de Ribeira, Luis Pérez, manifestó que el banco que inauguraron "é un pequeño exemplo de cómo a colaboración entre empresas e comunidades pode facer unha diferencia significativa no noso entorno". Agregó que desde el Ayuntamiento continúan apoyando proyectos que promuevan la sostenibilidad y el cuidado del mar, "que non só é unha fonte de sustento para moitas familias, senón tamén un pilar fundamental na nosa cultura e modo de vida".
Xanxo Muñiz, representante de la Sociedad Cooperativa Gallega del Mar Santa Eugenia-OPP83, destacó que para su cooperativa "a participación neste proxecto supón poñer o noso graniño de area na conservación do medio ambiente e á sostibilidade dos recursos". Agregó que la flota de buques arrastreros de su organización está comprometida con la sostenibilidad, "aplicando medidas de reducción do esforzo pesqueiro e de limitación ou redución da súa actividade no medio mariño. Polo tanto, a recollida de lixo mariño é un paso máis na consecución do obxectivo de preservar a riqueza dos nosos mares". Manola Lijó, de la Asociación de Armadores de Ribeira, declaró que “eramos conscientes que tiñamos que aportar o noso pequeno gran de area. Sabemos que o que podemos aportar é mínimo e que non vamos a limpar o mar nos solos, pero tamén sabemos que os centos de kilos que recollimos non quedarán flotando nos mares a mercede das correntes”.
“Con este proyecto, redoblamos el compromiso con la investigación e innovación para buscar soluciones al problema de los residuos marinos”, señaló María Troncoso, de Coca Cola Europacific Partners, quien añadió que la elaboración del banco “supone un avance en la innovación aplicada a la economía circular que caracteriza a Mares Circulares. Un hito que se une al logro ya conseguido en anteriores ediciones de reutilizar el plástico PET, que recogemos en las limpiezas de entornos acuáticos, en la producción de la primera botella con un 25% de PET marino apta para el uso alimentario”, explicó.