El Concello de Ribeira suspende temporalmente las autorizaciones de conciertos que precisan de permiso municipal mientras se ultima la regulación de diversos aspectos sobre esa actividad. La decisión se adopta después de una serie de incidencias registradas en los últimos tiempos -la última fue el pasado miércoles a plena luz del día en la zona de Bandourrío, que incluso llegó a causar molestias a los usuarios de la residencia de mayores-, por “coincidencia de actuaciónsnunhamesma rúa, solicitudes sen antelación suficiente para a súa aprobación e notificación, extralimitacións nos horarios permitidos, instancias sen aclarar a utilización ou non de equipos de amplificación e a súa potencia, entre outras”. Se prevé que en plazo aproximado de dos semanas esté lista esa regulación y que, como muy tarde, ya se puedan retomar esas actuaciones musicales en la noche del 31 de octubre. Entre los criterios que se pretenden incluir figura la solicitud de autorizaciones con un mínimo de 7 días de antelación, por lo que los locales y entidades interesadas en programarlos en Halloween pueden presentar ya sus instancias a través del registro general municipal.