La Valedora do Pobo admitió a trámite la queja de un comunero de Olveira, José Ayaso, que le trasladó la situación de “indefensión” en la que asegura que se encuentra. En su escrito dirigido a la alta comisionada gallega, indica que lo hace junto a otros comuneros “por la falta de información y transparencia en diversas gestiones realizadas por parte de la junta directiva, concretamente en relación a la vulneración e incumplimiento de la legalidad vigente”. Refiere que en la última asamblea general ordinaria, del 21 de abril, “se dejaron de abordar puntos del orden del día, así como la impugnación del estado de las cuentas, que fueron presentadas sin ningún membrete, firma o sello de la entidad vecinal”. La Valedora do Pobo comunica que ya inició las actuaciones oportunas ante las consellerías de Medio Rural y Medio Ambiente para que en el plazo de 15 días le faciliten información sobre los problemas que motivan la referida queja, y que cuando reciban los informes oportunos se los remitirán al recurrente.
Ayaso adjuntó medio centenar de firmas de comuneros denunciando esas situaciones e incluyó comunicados dirigidos a las secretarías generales técnicas de las consellerías de Medio Rural y de Medio Ambiente “solicitando información sobre determinadas irregularidades de la comunidad de montes”, y para tener constancia de la cantidad de toneladas de madera talada y los importes obtenidos por las mismas. “La Consellería de Medio Rural nos informó en varias ocasiones sobre las toneladas taladas ‘aproximadas’, pero nunca con datos reales y concretos, como tendría que ser su obligación”. Recuerda que las talas se hicieron en terrenos de esa comunidad y dentro del Parque Natural de Corrubedo e Lagoas de Carregal e Vixán, y que en estas últimas se invirtieron fondos Feder de la Unión Europea y de la Xunta de Galicia, “usando material pesado”, detalló el comunero denunciante.
José Ayaso recordó también que ya hay abierto un expediente anterior por una queja en dicha institución, y señala que la situación “continúa degradándose”, además de que la información que les proporcionan es casi nula y que Medio Rural y Medio Ambiente “son conocedoras y cómplices de esas presuntas irregularidades, perjudicando los intereses de los comuneros, en particular, y de toda la parroquia en general”. Estos comuneros indican que al no haber cesado la directiva el pasado 21 de abril, tal y como se recogía en el orden del día pero sin que lo hubiera hecho, “sospechamos que supuestamente puede que dejen las cuentas vacías e incluso con deudas, algo que suele hacerse por costumbre”. Y recalcaron que los puntos 6 y 7 de esa asamblea no se abordaron “porque la presidenta dio por terminada la asamblea en medio del punto sexto sin que cesase la directiva”.