El Arzobispado de Santiago cede a Cáritas, a través de un convenio, la casa rectoral y una huerta en A Illa de Arousa, que será destinada a vivienda de acogida temporal de personas y familias necesitadas.
Corresponde a Cáritas la ejecución de las obras de adecuación necesarias para que el inmueble pueda ser destinado a esta finalidad. La gestión del edificio la llevará a cabo la entidad social, que no podrá encomendarla o cederla a un tercero si no es con el consentimiento previo y por escrito del Arzobispado.
Todos los gastos derivados de la utilización de los inmuebles serán a cargo de Cáritas, así como los de su conservación y mantenimiento, y las reparaciones o las modificaciones que hubiera que realizar por obligación legal o de las compañías suministradoras de energía o servicios. Igualmente, Cáritas se compromete con todas las obligaciones que se imponen a nivel laboral respecto de los trabajadores, o en su caso, voluntarios que presten sus servicios en estas dependencias.
El acuerdo prevalecerá hasta el 31 de diciembre de 2026, prorrogándose de forma automática por años, salvo indicación expresa de alguna de las partes con al menos dos meses de antelación a la fecha de renovación.
El convenio fue firmado por José Fernando Barros en representación del Arzobispado de Santiago, en su condición de Ecónomo de la Diócesis de Santiago, y Pilar Farjas como directoras de Cáritas Diocesana de Compostela. En el acto estuvieron presentes además David Álvarez y Mar Viqueira, consiliario y directora de Cáritas Interparroquial de Arousa, respectivamente.