El Concello retiró la semana pasada la cruz del cruceiro de As Quintáns (Castrelo) por peligro de desprendimiento después de que se partiera la mitad del capitel sobre el que descansaba. En un principio solo se recogió la pieza desprendida, pero posteriormente se comprobó que existía ese riesgo.
El concejal Liso González indicó que han iniciado los trámites ante Patrimonio de la Xunta para poder repararlo, pues cuando estos elementos se hallan fuera del centro urbano, como es el caso, son de su competencia.
Cabe recordar que también se había solicitado presupuesto a un restaurador y que se desconoce cuándo se rompió exactamente el capitel. No obstante, cuando González tuvo constancia, envió al lugar al técnico de Patrimonio quien determinó que el capitel se fracturó debido a un problema estructural; seguramente la humedad de los años afectó a las cuñas que se empleaban para unir las piezas y se rompió por la parte más débil. Según la inscripción que tiene en el varal, este bien protegido tiene 200 años de antigüedad.