El anuncio de la integración de Independientes por Ribadumia (IR) —el partido del alcalde— en el PP sigue provocando reacciones. Esta vez, el movimiento es interno y afecta de lleno al gobierno municipal para lo que resta de mandato. Las concejalas Pilar Martínez y Mar Moimenta presentan al Pleno de este jueves (20 horas) un escrito en el que comunican su decisión de abandonar sus atribuciones de gobierno, así como sus asignaciones o retribuciones políticas. Eran las dos concejalas liberadas, el núcleo duro del gobierno de David Castro, que lo acompañarán todavía dentro de Independientes hasta el final del mandato (13 de junio), pero que ya no seguirán prestando sus funciones dentro de su gobierno.
Los motivos hay que buscarlos en la misma integración de IR en el PP, tal y como reconoce el propio alcalde: Las dos ediles se sienten más cómodas como independientes y no están dispuestas a integrarse en el Partido Popular, de ahí el movimiento. Tampoco formarán parte de la futura lista electoral de Castro, que sí confía en mantener al resto de su equipo más próximo, salvo, quizás, una persona más. La lista todavía no está cerrada.
El regidor valoraba ayer que la decisión de las dos ediles es “respetable”, pero también “unha pena”, por cuanto destaca el enorme trabajo y entrega de las concejalas durante estos años.
El hecho de que ambas permanezcan en IR mantendrá inalterable el peso del grupo a la hora de votar la nueva composición de las comisiones municipales para las que, eso sí, la formación de Castro deberá asignar nuevos representantes, al igual que para las áreas de gobierno vacantes.
Como tampoco dejan sus actas de concejal, lo que no variará es la composición de la Corporación, a la que, en principio, le quedan en este mandato apenas un par de sesiones plenarias.