Los seis puestos ambulantes que se ponían en la zona de A Calzada y el Parador y que en esta edición del Albariño tienen que ser reubicados en otros puntos de la localidad se manifestarán a partir del lunes en las puertas del Concello cambadés. Los feriantes se reunieron con el concejal de Promoción Económica, Xurxo Charlín, y responsables de la Policía Local que les señalaron que eran motivos de seguridad y de limpieza los que motivaban el cambio de ubicación desde los puntos que ocupaban habitualmente al entorno de la Praza de Asorey. Los afectados apuntan que cuando se les asignó la nueva ubicación empezaron a recibir llamadas de otros vendedores diciéndoles que esas zonas ya estaban dadas. Algo que el concejal de Promoción Económica niega de forma tajante. “Non é certo que se lles dese un sitio ocupado por outros postos. Iso é mentira”, manifiesta.
En todo caso las explicaciones del edil –avaladas por criterios técnicos que recomiendan dejar totalmente libre de puestos las zonas en las que estos seis ambulantes se colocaban– no convencen a los afectados por el traslado. De ahí que adviertan que a partir de este mismo lunes se manifestarán “día y noche” delante de las puertas del Concello al considerar que el trato que se les está dando es “injusto” y que “no nos parece normal después de 23 años asistiendo a esta fiesta y no tener ningún problema”.
Dado que este año la fiesta durará más días de lo habitual –de hecho arrancan con el concierto de Nicky Jam el viernes 29– la pretensión es que estén colocados la jornada anterior. Los ambulantes que ahora dicen que se movilizarán indican que “nos vamos a poner en nuestros puestos y vamos a protestar donde haga falta, en el desfile, en las catas o donde haga falta”.
Xurxo Charlín expone que la fiesta del Albariño ha ido ganando en asistencia con el paso de los años y que es inviable por motivos de seguridad permitir la colocación de puestos ambulantes por ejemplo en la zona de la Praza do Concello, donde los días grandes de las celebraciones es difícil transitar. Expone que “en total son 220 postos os que veñen ao Albariño e hai que facer para que se coloquen de forma segura e correcta”.