La Corporación de A Illa celebraba anoche el Pleno ordinario de mayo en el que dos de los puntos de la orden del día tenían por objeto una modificación presupuestaria para la financiación de la obra de la Praza de O Regueiro.
El alcalde, Carlos Iglesias, explicaba que se trata de un “cambio puramente técnico”, que no compromete el dinero reservado para la obra. En síntesis, O Regueiro contaba con fondos también del adelanto del Plan Concellos 2023 de la Diputación, pero la Intervención provincial advirtió que, jurídicamente, no se puede “gastar máis do 2023 do que se gasta en inversión do 2022”. Eso obliga a sacar a O Regueiro del Plan Concellos 2023, destinándolo a otras obras, ya presupuestadas con otros fondos. Y con esos fondos liberados, invertir en O Regueiro. Un cambio de inversión que no altera la esencia, defendió el primer edil, ya que los proyectos previstos se mantienen.
El PSOE llevaba una moción para exigir a la Xunta la mejora del firme de la carretera PO-307, en un pequeño tramo pendiente: Entre las dos rotondas de entrada. El BNG llevó otra moción, de cubrición de los parques infantiles. Los socialistas aún llevaban otra, instando a la Xunta a que asuma sus responsabilidades de depuración.