La última operación antidroga con vínculos en Arousa arrestó a once personas

El dispositivo con epicentro en Carballo se saldó con casi diez kilos de estupefacientes y continúa abierta
La última operación antidroga con vínculos en Arousa arrestó a once personas
Los agentes durante uno de los registros efectuados en la operación | CEDIDA

El último operativo contra el narcotráfico desarrollado en localidades coruñesas y de O Salnés se ha saldado con la incautación de 5,5 kilos de cocaína, tres de hachís, uno de marihuana, 56.000 euros en efectivo, un arma de fuego, varias simuladas y armas prohibidas, así como cuatro vehículos, tres de ellos con un sistema de ocultación artesanal (caletas), básculas de precisión y diversa documentación. Asimismo se detuvo a once personas de las cuales, cuatro ingresaron en prisión provisional, pero no se descartan más arrestos porque sigue abierto. 


El dispositivo fue ejecutado por Vigilancia Aduanera de la Agencia Tributaria y Policía Nacional y dirigido por el Juzgado de Instrucción nº 1 de Corcubión, logrando desarticular una organización criminal dedicada al narcotráfico con ramificaciones en diferentes puntos de la geografía gallega con la realización de diez registros domiciliarios, uno de ellos en una casa de A Illa de Arousa.

 

Líder de la banda

Fuentes del operativo explicaron que la investigación se inició a principios de año, cuando detectaron en A Coruña la presencia de un ciudadano gallego, afincado en la localidad de Cee y con antecedentes penales por tráfico de drogas y que se dedicaba al transporte de sustancias estupefacientes para distintas organizaciones de narcotraficantes.


Para ello, empleaba vehículos de alquiler y, de manera más habitual, vehículos dotados con “caleta”, es decir, un sistema de ocultación de la droga diseñado en el interior de estos vehículos. Igualmente se detectó su presencia en un importante punto de venta de droga en la localidad de Carballo, donde reside su principal socio. Así, tal y como ha informado la Agencia Tributaria, el hombre asentado en Cee y líder de la organización “no dudaba en atravesar España a bordo de uno de sus vehículos o de alguno de alquiler, exclusivamente para mantener una entrevista de minutos con algún proveedor de estupefacientes, con el objetivo de preparar futuras operaciones de adquisición de droga”. De hecho, “mantuvo numerosas entrevistas con personas pertenecientes a terceras organizaciones criminales preparando la introducción en España de importantes cantidades de droga vía marítima”. 

 

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Los investigadores hallaron una plantación de marihuana “indoor” | CEDIDA


Una vez que adquiría la sustancia estupefaciente en diferentes puntos de España, la ocultaba en varios lugares marcados por la organización en la provincia de A Coruña, concretamente en la zona de Carballo. Después de la adulteración y manipulación, la droga era distribuida en Galicia por varios subordinados del líder de la organización, quien contaba con la estrecha colaboración de su socio, con antecedentes por delitos contra las personas. Ambos se habían conocido en prisión.

 

Detonante 

Así las cosas, en junio los investigadores detectaron que se desplazó a Madrid utilizando a una tercera persona para el transporte de la droga en un vehículo dotado de “caleta” mientras él realiza las labores de lanzadera en otro coche, para detectar presencial policial en la carretera. Con todo, los agentes pararon al transportista y lo detuvieron tras encontrar cinco kilos de cocaína ocultos en el coche.

 

 


Tras estos hechos, las unidades policiales participantes en el operativo comenzaron a identificar a varios colaboradores y miembros de la organización “con un reparto de papeles bien definido”. En concreto, varios de los miembros de la red eran los encargados de la distribución de la droga a consumidores finales, otros se situaban como encargados de su ocultación, mientras que otros eran los responsables del transporte de las sustancias.

 

Medidas “máximas”

“Las medidas de seguridad de los detenidos eran máximas en la búsqueda de la presencia policial y en los traslados y entregas del estupefaciente, dificultando así la investigación y llegando a utilizar medios técnicos para detectar si estaban siendo objeto de seguimiento policial”, explican los investigadores. 
Una vez identificados todos los miembros de la organización, y con un amplio dispositivo en Galicia, se procedió a realizar diez diligencias de entrada y registro en Corcubión (cuatro), Carballo (cuatro) y uno en Muros y otro en A Illa. 


La operación contra el tráfico de drogas se ha llevado a cabo de forma conjunta por el Grupo de Información Regional de Estupefacientes de Unidad Operativa de Vigilancia Aduanera de Galicia (operación Baleas), la Unidad de Drogas y Crimen Organizado de A Coruña (operación Winter) y Greco Galicia. 

 

 

La última operación antidroga con vínculos en Arousa arrestó a once personas

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