La Xunta ha sacado a licitación la explotación, mantenimiento y conservación de las estaciones depuradoras de Tragove (Cambados), A Illa, Ribadumia y Meaño por un precio de casi cuatro millones de euros y durante año y medio. Actualmente estas plantas están siendo gestionadas mediante dos contratos diferentes.
La gestión se agrupará ahora y el ámbito de actuación está asociado a los sistemas de depuración de estas EDAR incluyendo los bombeos de cabecera, las conducciones de vertido de las de Ribadumia y Meaño y elementos accesorios, así como la impulsión del bombeo de Pasales hasta la meañesa.
No entra en el contrato el resto de la infraestructura del sistema de saneamiento asociado como son las redes locales, restantes estaciones de bombeo de aguas residuales y otros elementos, así como la conducción de vertido de la planta de A Illa y la del emisario de la de Tragove también en su tramo terrestre, siempre según el pliego de condiciones publicado por el ente público.
Los mismos señalan que estas instalaciones dan servicio a susodichos municipios, pero también a Vilagarcía, Vilanova, Sanxenxo y Meis.
En cuanto al personal adscrito a estas estaciones que la adjudicataria deberá subrogar, son ocho empleados actuales.
El contrato sale a licitación por 3.914.391 euros y un plazo de 19 meses. Las empresas interesadas en hacerse con él tienen hasta el 21 de febrero para presentar ofertas.
Por otra parte, cabe recordar que la Consellería de Medio Ambiente, de la que depende Augas, informó hace unos días de que las obras de mejora de esa EDAR de Tragove se están ultimando tras invertir casi cuatro millones de euros cofinanciados con el Feder. Recordó que se duplica la capacidad de tratamiento de la planta, además de realizarse otras mejoras porque los equipos y sistemas de la instalación, construida en 1993, estaban obsoletos.
También que cuando se haga efectivo el traspaso de medios, funciones, servicios y expedientes de la gestión del litoral gallego, mediante la Lei do Litoral de Galicia, retomarán el asunto de ese colector de saneamiento que conecta las aguas fecales de Vilanova con la depuradora ubicada en Cambados. De hecho, anunció que ya está analizando alternativas técnicas a la propuesta inicial, que era sustituir la actual tubería, la cual está obsoleta y provoca vertidos a esta zona, donde hay bancos marisqueros y operan empresas del sector mar-industria, y que Costas no autorizó.