La Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, a través de Augas de Galicia, ha sacado a licitación el contrato de explotación, conservación y mantenimiento de la depuradora de Tragove por  un importe de 612.315 euros.

La Plataforma Contratos Públicos de Galicia publicó ayer las características de este procedimiento para continuar la gestión, por un período de 9 meses, de la planta que trata las aguas residuales de los ayuntamientos de Vilanova de Arousa y Cambados. Las empresas interesadas tienen de plazo hasta el próximo 8 de mayo para presentar sus ofertas.

Fuentes autonómicas recordaron que la EDAR, ubicada en el puerto de Tragove, está diseñada para el tratamiento de un caudal medio de 12.000 metros cúbicos por día y una capacidad de depuración estimada para una población de 40.000 habitantes equivalentes. Dispone de un tratamiento biológico con cámara anóxica para eliminación de nitrógeno y con precipitación química de fósforo, así como con desinfección mediante rayos ultra violeta previo al bombeo de emisario.

En concreto, el contrato licitado ayer abarca los trabajos de explotación y conservación de las instalaciones que forman parte del sistema de depuración para que cumplan los cometidos para los que fueron diseñados en condiciones óptimas de funcionamiento, garantizando el mantenimiento y la conservación en perfecto estado de todas las instalaciones.

Detalles

Desde la consellería recordaron que la prestación de los servicios de saneamiento y abastecimiento son una responsabilidad de los ayuntamientos. “Non obstante, a Xunta de Galicia vén proporcionando o seu apoio técnico e financeiro aos municipios que o precisen”. Así, a través de Augas de Galicia, “ten asumido o servizo de mantemento da estación que trata as augas residuais dos concellos de Vilanova de Arousa e de Cambados desde o ano 2005, mediante un contrato de xestión e explotación no que o Goberno galego leva investidos máis de 14 millóns de euros”, añadieron. 
En la actualidad el organismo hidráulico de la Xunta de Galicia se encarga de prestar estos servicios de depuración en 27 estaciones depuradoras de aguas residuales municipales.

Las mismas fuentes también destacaron que la reciente y controvertida Lei de mellora da xestión do ciclo integral da auga pone a la disposición de los ayuntamientos herramientas para profesionalizar los servicios del agua y un sistema de adhesión voluntario para garantizar una gestión de calidad, respondiendo a las carencias derivadas de las dificultades técnicas y financieras que tienen “moitos”.