El alcalde de Catoira, Xoán Castaño, volvió a arremeter ayer contra el Partido Popular tras fracasar la aprobación inicial para la gestión directa de la escuela infantil municipal debido a la ausencia de una concejala nacionalista por motivos de salud, al necesitarse la mayoría absoluta para dicha subrogación. Una propuesta que el ejecutivo proyecta volver a presentar en una sesión plenaria extraordinaria “cando conte coa totalidade dos integrantes do grupo municipal do BNG”.

El regidor afirmó que los populares “quedan retratados” tras su votación decisiva en el Pleno del lunes y acusó a la formación conservadora de “querer poñer en risco a viabilidade da escola infantil do municipio e non preocuparse por deixar ás familias vikingas sen un servizo fundamental para a conciliación”. En la misma línea, Castaño sostuvo que al PP “non lle interesa dar servizos á veciñanza de Catoira, só lle interesa bloquear propostas deste equipo de goberno aínda sabendo que son positivas para a xente”, sentenció.

Una votación adversa que, según el alcalde, “só conseguirá retrasar a proposta de xestión directa, xa que o goberno local tratará de poñer o servizo en marcha canto antes”. Por ello, el ejecutivo catoirense ya estudia una nueva fecha para la convocatoria de una sesión extraordinaria de manera urgente. Una proceso de municipalizar del servicio que “hai que poñelo en marcha canto antes porque a empresa está cubrindo agora mesmo a actividade obrigada polo Concello”, añadió.

Otro de los puntos de fricción que evidenció el mal clima reinante entre oposición y equipo de gobierno fue la ratificación de la pertenencia del Concello en el geodestino Mar de Santiago, cuya urgencia se denegó con PP y PSOE unidos votando en contra, algo que no se aprobara en sesión plenaria en el momento de la creación a pesar de ser imprescindible.

Una oposición con la que también fue crítico el alcalde, que acuso al PP de actuar con “incoherencia ao votar no Pleno tamén en contra dun proxecto propio dos populares”, aseguró. De todos modos, Castaño destacó que el geodestino Mar de Santiago “non é unha cuestión prioritaria para o actual goberno”, pero volverá a tratar su adhesión en Pleno porque “pode supoñer unha fonte de financiamento que non sería lóxico desbotar unha vez que hai unha implicación acordada previamente e hai necesidade de fondos”.