Ante una Semana Santa marcada por las lluvias y las alertas en la que la afluencia turística pudo verse afectada por las cancelaciones de última hora, la opción termal prospera y registra datos de ocupación del cien por cien con un turismo que cada vez gusta más tanto al visitante nacional, como al extranjero.
Caldas de Reis es sin duda uno de los municipios más populares en lo que se refiere a turismo termal, no sólo por el popular Balneario Acuña, sino también por ser un punto clave en el Camino Portugés de miles de peregrinos en su ruta hacia Santiago de Compostela. Precisamente en este balneario la ocupación esta Semana Santa alcanzó un dato del 100% con un leve descenso en el día de ayer, Domingo de Pascua, pasando a un 75%. Esto se entiende al tener en cuenta que el turismo en este establecimiento está muy motivado por el Camino de Santiago, y que estos buscan llegar a la capital gallega el domingo como destino final de su trayecto.
La procedencia de las reservas son en su mayoría extranjeras, destacando entre ellas a alemanes, ingleses y también estadounidenses y canadienses. Estos últimos, sobre todo, a partir de la película de 2010 protagonizada por Martin Sheen, The Way (El Camino), según cuentan desde el balneario caldense.
En cuanto a las cancelaciones aseguran que fueron “muy pocas”, a diferencia de otros muchos hoteles, sobre todo en las zonas de costa, que se vieron afectados por las condiciones climáticas a la hora de recibir a todos los viajeros esperados estos días festivos. Fue el caso del Hotel Gran Talaso de Sanxenxo donde aseguran que a pesar de contar con un 70% de ocupación estos días, no han registrado todas las reservas que esperaban por las previsiones de vientos y lluvias.
En Caldas las lluvias no frenaron a los peregrinos y fue necesario habilitar el pabellón por
falta de espacio
Precisamente este hotel cuenta también con opción de balneario, aunque no se trata de un complejo de aguas termales, aún así esta opción ha sido clave también en este alojamiento. “Siempre ayuda el tema del balneario, pero nunca se cumple lo esperado cuando no está buen tiempo”.
Dejando de nuevo la costa y volviendo a Caldas, a pesar de ser un punto clave de esta ruta xacobea, desde el Balneario Acuña también aseguran que otro porcentaje potente de visitantes pertenece al grupo de Imserso motivado por un turismo que cada día gana más devotos. “El termalismo social es muy acudido y estos últimos años más aún”, explican desde el establecimiento termal.
Por su parte, no solo el balneario de Caldas recibe visitantes, el municipio cuenta con una pequeña pila termal ubicada en la Rua Don Carlos García Bayón. Ahí cientos de peregrinos se reúnen cada día para disfrutar de un descanso con aguas termales públicas sin necesidad de reserva ni pago. Se trata de una fuente de dos caños construida por el Concello en el año 1881, que mana agua a unos 50 grados.
“Si vienes cualquier día a eso de las tres o cuatro de la tarde, ahí hay unos 50 peregrinos, todos con los pies metidos ahí”, explican desde el Albergue As pozas Termais donde también aseguran que estuvieron “completos hasta hoy”. Tanto fue el colapso que desde el Concello se vieron en la necesidad de abrir el pabellón porque no había camas disponibles para todos los caminantes que pisaron Caldas en esta Semana Santa.
Ya en Cuntis el tema cambia totalmente, pero el turismo termal sigue dejando huella. En este municipio el peregrino pasa a ser un turista más puntual, que puede llegar a pasar por el lugar motivado por su atractivo termal, pero a diferencia de lo visto en la capital comarcal, en Cuntis prima el turismo nacional, sobre todo procedente de Andalucía y Cataluña, tal y como explican desde el Hotel Castro do Balneario. Aunque estos tampoco dejan atrás a municipios próximos como Pontevedra o Vigo de donde por lo visto también procede una buena parte de las visitas.
En Cuntis las lluvias y el mal tiempo fueron un incentivo para aumentar aún más sus reservas de última hora
Desde este mismo alojamiento aclaran que a diferencia de lo que vivieron otros complejos, en su caso las lluvias y el mal tiempo fueron un incentivo para aumentar aún más sus reservas y llegar al 100% de su ocupación en estos días. “Como somos un balneario estábamos más o menos al 70% y al llover tanto y ser balneario se aumentó hasta el 100%, estos días estuvimos llenitos”, resuelven.
A pesar de no ser un destino que atraviese el Camino sí hay algunos, más bien pocos, pero algunos que conocen la popularidad de Cuntis y su turismo termal y llaman previamente con la idea de visitar sus aguas y sus populares baños.
Dejando a un lado la comarca de Caldas, a casi 50 kilómetros se encuentra la Illa da Toxa y en ella otro de los balnearios de aguas termales más populares de la zona de Arousa. En el caso de O Grove la ocupación durante esta Semana Santa no fue tan triunfal como las comentadas anteriormente, de hecho el dato de ocupación se registra en torno a un 60%.
Desde el Eurostars Gran Hotel La Toja explican como en este caso el turismo de la zona ha sido más bien nacional, aunque también destacan al visitante portugués, pero a diferencia de Caldas y en menor medida Cuntis, los peregrinos no son para nada un turista que se deje caer por esta zona.
En cuanto al volumen de reservas explican que más o menos siguió la misma línea que el año pasado, y a pesar del mal tiempo en su caso no destacan un bajón claro de visitas al lugar.
La Xunta de Galicia activó la alerta naranja para el sábado por temporal costero en el litoral de las provincias de A Coruña y Pontevedra, pero el viernes tampoco dio tregua y azotó la zona de Arousa con fuertes lluvias. Este fue uno de los temores de los establecimientos hoteleros para estos días de Semana Santa, sin embargo muchos turistas suelen esperar hasta el último momento para confirmar sus reservas, pendientes siempre de cómo evoluciona la previsión meteorológica.
Esta tendencia a actuar con mayor precaución ha contribuido a que el número de cancelaciones no haya sido tan elevado como se temía inicialmente. Además, el turismo de peregrinación a Santiago no parece haberse visto tan afectado, ya que desde Caldas aseguran que no había lugar suficiente como alojar a todos los caminantes que llegaron a la Vila Termal en estos días.
Caldas de Reis y Cuntis forman parte de la popular Ruta das Vilas Termais a las que se suman también los municipios de Catoira, O Grove, Mondariz, Ponte Caldelas y Vila de Cruces. Así la provincia de Pontevedra demuestra una arraigada tradición de termalismo. No todas las instalaciones termales históricas se han conservado hasta la actualidad, algunas han desaparecido, sin embargo, su huella permanece en el paisaje, en la arquitectura o en algunos de estos municipios que cada día son más populares precisamente por este atractivo termal.
Caldas cuenta actualmente con dos balnearios pensados para alojar turistas tanto de peregrinación como de interés termal, el Balneario Acuña y el Balneario Davila, y a su vez cuenta también con una poza termal pública en pleno centro de la villa. El Concello trabaja ya en unas nuevas termas públicas, similares a las que ofrece Ourense pero de menor tamaño, aunque por el momento se trata de un proyecto que no tiene fecha prevista.
Caldas, Cuntis y O Grove forman parte de la Ruta das Vilas Termais, reflejo de la tradición termal de la provincia
Por su parte, Cuntis concentró todas sus aguas en la primera mitad del siglo XX, tanto los seis baños como las trece fuentes termales con las que contaba el lugar. Todas quedaron unificadas bajo una misma dirección.
Catoira es uno de esos municipios que perdió sus aguas termales. Fue en 1970 cuando echaron el cierre tanto por temas legales como por el caudal y la salubridad del agua que ya no eran los idóneos. Aún así desde Turismo de Rías Baixas aseguran que hay estudios que constatan la presencia de asentamientos sobre manantiales ricos en aguas termales y probablemente medicinales, concretamente en A Lomba.
Finalmente, O Grove tuvo su primera instalación termal en 1842 y poco después, en el 1903, se constituye la Sociedad Anónima de La Toja para trabajar en la construcción del Gran Hotel. En los años 20 era uno de los mejores destinos termales de Europa y en la actualidad dispone de dos balnearios y un Hotel Talaso que recibe cada año a miles de turistas que buscan el descanso de aguas termales.
En definitiva, el turismo de sol y playa resulta no ser el único que en Galicia tiene en vilo a los turistas, a falta de buen tiempo para disfrutar de los arenales de las Rías Baixas los turistas, tanto nacionales, como extranjeros y entre ellos peregrinos, optan también por un tipo de experiencia que cada vez está más a la orden del día y que continúa conquistando: el turismo termal.