La Xunta llevó a cabo la reposición de cerca de 2.000 metros cuadrados de cubierta del CPI Progreso de Catoira, que contó con una inversión autonómica de 260.000 euros. Según explicó esta mañana el delegado territorial, Agustín Reguera, permitirá mejorar la comodidad del alumnado y la eficiencia energética del centro, para disminuir el gasto eléctrico y favorecer el ahorro económico a medio plazo. Las obras también incluyeron la reforma de la sala de calderas y la mejora de los emisores.
El delegado territorial aprovechó la ocasión para recordar el compromiso de la Xunta con el sector educativo y aseguró que el gobierno autonómico “o benestar e a comodidade dos nenos e dos docentes é unha prioridade”.