La gestión de los bancos de libre marisqueo de la Ría de Arousa está en el aire o, al menos, no se llevará a cabo como se venía haciendo en los últimos años. La decisión de la asociación Rañeiros de disolverse ha provocado movimientos en las cofradías de la Ría de Arousa, que tienen previsto reunirse para determinar qué va a pasar a partir de ahora. La entidad nació con fuerza, con la mayoría de los pósitos arousanos adheridos y con el objetivo de dar vida a unas zonas que agonizaban en cifras de producción desde hace varias campañas. Sin embargo la asociación se fue desangrando poco a poco y las cofradías la fueron abandonando. De ahí que se optase por tomar la decisión de disolverla.
En la Consellería do Mar todavía no tienen la documentación relativa a la disolución total de la entidad que –recuerdan– en todo caso es la titular del plan de gestión de Os Lombos, Cabío y O Bohído hasta final de año.
Ante tal situación –y con una caída importante de la producción que obligó al paro biológico hace ya unos meses– las cofradías afectadas ya se han puesto en contacto entre sí para determinar qué pasos a tomar a partir de ahora. La idea que rondaba inicialmente entre los patrones era la de que sea la propia Consellería do Mar la que vuelva a asumir la gestión de los citados bancos marisqueros con un compromiso en cuanto a inversión para su regeneración.
En todo caso el departamento que dirige Alfonso Villares señala respecto al libre marisqueo que si Rañeiros abandona la gestión cualquiera otra entidad puede solicitar asumir la misma para el trienio 2024-2026. Para ello –exponen desde la administración autonómica– deben presentar la solicitud antes del 1 de noviembre de este mismo año.
Lo cierto es que tal y como está el panorama, con una preocupación hecha pública en más de una ocasión respecto de la falta de producción en la Ría, poco hace prever que se geste una nueva asociación o entidad que se haga cargo de la gestión del libre marisqueo.
El problema en los bancos de Os Lombos, O Bohído y Cabío llegó varias veces al Parlamento de Galicia. La medida de urgencia adoptada este año por la administración autonómica fue la de anunciar el paro biológico con una línea de ayudas para que los rañeiros pudiesen recibir compensación ante la imposibilidad de poder acudir a faenar. No se sabe si este tiempo sin estar en la zona incrementará la producción en la próxima campaña.