La Agrupación de Parquistas y la empresa Cobre San Rafael colocaron ayer dos sondas en Os Lombos y en Carril para medir la calidad medioambiental del Río Ulla y su desembocadura en la Ría de Arousa. Los aparatos de medición fueron colocados por la Estación de Biología Marina de A Graña. Estarán fondeados en el medio marino completando en una primera campaña un ciclo mareal de, aproximadamente, quince o veinte días.

La intención, según explicó el encargado de asuntos medioambientales de Cobre San Rafael, Constantino Penedo, es que las sondas funcionen durante dos campañas, aunque será un estudio autorregulable, por lo que dependiendo de los resultados podría estar más tiempo.

“Se os parquistas piden deixar este equipo en continuo, deixarase”, explicó el representante de la empresa. Las sondas realizarán mediciones de niveles de clorofila en el agua, que está directamente relacionada con el contenido de fitoplancton, base de la cadena alimenticia marina. El dato será relevante para avanzar en el conocimiento de la causa o las causas de la caída de la producción del marisco. “Ao longo destes anos producíronse episodios de mortandade que nos descolocaron”, explicó el presidente de los parquistas, José Luis Villanueva, que ahondó en que la mortandad es normal durante una riada, pero no en otros momentos en los que se registró una elevada pérdida de berberechos y almejas.

Datos cada cinco minutos

Aunque el tiempo pueda parecer insuficiente para extraer conclusiones, José Luis Otero, coordinador de A Granxa, explicó que las sondas ofrecen muestreos “cada cinco minutos” por lo que “son moitos datos”. Y, en cualquier caso, se trata de un periodo prorrogable. La Estación, dependiente de la Universidad de Santiago de Compostela, ya estaba realizando un programa similar en la Ría de Ferrol..

Esta iniciativa forma parte del plan de sostenibilidad y responsabilidad de Cobre San Rafael, denominado Terras, y en concreto de Terras del Ulla que, en colaboración con los parquistas, realiza una serie de estudios para incrementar el control ambiental en el Ulla y en los bancos marisqueros de Carril. Este proyecto podría incluso ampliarse con una tercera sonda, para lo cual ya se habló con el Intecmar, ya que se colocaría en Vilaxoán.