Veinte minutos más temprano deben levantarse los usuarios del tren que –hasta ahora– cogían el convoy que pasaba por la capital arousana a las siete y cuarto de la mañana con destino a Santiago. Las obras que se están realizando en la estación Clara Campoamor de Madrid han afectado a la modificación de horarios dejando a estudiantes y trabajadores muy descontentos. De ahí que un grupo se haya unido para protestar ante Renfe y para que “se respete a enquisa que se fixo, que sabemos que existe e na que a maioría da xente quería que se mantivese o mesmo horario”. Estos afectados achacan los cambios a las quejas de un grupo de usuarios de Vigo, pero entienden que no responden al sentir mayoritario.
“Aféctanos a todos, tanto aos traballadores como aos estudantes. Chegamos a Santiago moi cedo, perdemos tempo da nosa vida”, resaltan. Señalan que los usuarios no son solo los vecinos de Vilagarcía, dado que es una estación que –sobre todo desde la entrada en vigor de los abonos gratuitos– ha ganado también en usuarios de concellos limítrofes. “Por encima custa aparcar, polo que temos que chegar con máis tempo”, resaltan. Entienden que el servicio público del tren debe atender a las necesidades “da maioría e non dun grupo, por moito ruído que faga”.
Lo cierto es que no son las únicas quejas que existen en cuanto a horarios. También ocurren con los convoyes de última hora que salen de Santiago hacia Vilagarcía. Uno a las 22 horas y otro solo diez minutos más tarde por lo que no solventa los problemas de aquellos que salen más tarde de trabajar y que necesitan tren para volver a sus casas.