Los vecinos de Guillán se quejan del mal estado en el que se encuentran los márgenes de la recién reformada Rúa Xiabre. El Concello acaba de actuar sobre uno de los tramos  de esta calle, bastante grande, que discurre por el monte del mismo nombre. 

Las obras incluyeron ensanche y renovación del asfaltado, entre otras actuaciones, pero los residentes en la zona se quejan de que, por los lados, quedó llena de barro, tierra y piedras.
 

El problema es mayor en los días lluviosos, como los de esta semana. Durante la noche del lunes al martes, en  la que además hubo bastante viento, pequeñas piedras y restos de barro se desprendieron hacia la calzada.
 

La Asociación de Vecinos considera que se debe buscar una solución para este problema, del que ya advirtieron al Concello, ya que puede resultar peligroso para los coches que circulan por la zona.
 

Y es que, además, se trata de una carretera muy transitada. Desde que se realizaron los cambios en el casco urbano, con el aumento de las peatonalizaciones, son muchos los conductores que utilizan vías secundarias de escape. También para huir de Rosalía de Castro, con constantes atascos. La Rúa Xiabre se convirtió así en una zona de tráfico, por lo que fue necesario actuar.