“Unha desfeita criminal”. Con estas palabras definen las mariscadoras de Carril la situación que ayer a primera hora de la mañana se encontraron en la playa de A Compostela. El presidente de la agrupación de marisqueo a pie, Rolando Vidal, manifiesta que “llevábamos varios días haciendo un seguimiento de cómo iba el marisco y veíamos que estaba débil, pero lo que encontramos ahora ya ha sido tremendo”. Apuntan a que la producción de berberecho se ha perdido al “cien por cien” y que de la almeja “por lo menos la mitad”.

Vidal incide en que en el mes de marzo sembraron alrededor de 80.000 euros de almeja japónica en la playa y que “ahora estamos viendo que hay muchísima de esta que está muerta”. Apuntan a que “con la babosa ya no lo intentamos, la sembramos tres años y optamos por no hacerlo más”. 

Las mariscadoras achacan al temporal la situación de mortandad. “Con la bajada de la salinidad ya estaba débil, por eso lo veníamos vigilando con la esperanza de que aguantase, pero con esto temporales y el viento fuerte no hay nada que hacer. Está todo muerto”. Ahora el lunes, ya con la agrupación en pleno, acudirán a la playa para “intentar salvar lo que pueda estar vivo, aunque no sabemos cuánto va a ser en realidad”.

Lo cierto es que este episodio se ha repetido en otros puntos de la Ría de Arousa en los últimos días, como en la zona de Rianxo y también en Vilanova. Algunos achacan la mortandad a la apertura de los embalses, que sueltan una cantidad ingente de agua dulce que llega a la Ría y a los bancos marisqueros provocando una bajada de la salinidad brutal y que deja al marisco o débil o muerto. De ahí que la propia PDRA y diferentes cofradías hayan remitido escritos a Augas de Galicia para que haya un plan de vaciado de embalses regulado y acordado con el sector.