Un perro de raza peligrosa atacó el domingo por la mañana a su dueño provocándole graves heridas en la cara. De hecho, fue trasladado de urgencia al Hospital Clínico de Santiago. Según fuentes conocedoras del caso, el animal tenía el obligatorio chip identificativo y el propietario contaba con toda la documentación en regla exigida por la normativa para la tenencia de este tipo de canes.
Los hechos ocurrieron sobre las once y media de la mañana en el interior de una vivienda ubicada en el llamado Camiño das Laxes, en el lugar de Renza. Se desconocen las circunstancias y las causas del ataque, pero el caso es que el ejemplar de la raza pitbull terrier americano mordió a su propio dueño en la zona del rostro. Según trasladaron testigos presenciales a las autoridades, sus heridas eran graves.
Fueron personas allegadas a la víctima las que llamaron solicitando la presencia de una ambulancia que, a la vista de las lesiones, decidió realizar su traslado de urgencia al Hospital Clínico de Santiago. Posteriormente, los técnicos sanitarios alertaron al 112 Galicia del caso por una mordedura de perro y desde la central se dio parte a la Policía Nacional y a la Policía Local para su desplazamiento hasta este lugar de Sobrán.
Fuentes conocedoras del caso explicaron que los agentes abrieron las correspondientes diligencias y recabaron los primeros datos, empezando por comprobar la situación del pitbull, el cual fue recluido en la vivienda a la espera del procedimiento posterior que sigue en estos casos y que suele consistir en la evaluación del animal, para conocer su agresividad y las circunstancias de la agresión.
Según las mismas fuentes, los agentes comprobaron que la mascota tenía el obligado microchip identificativo. Su propietario también tenía en regla la documentación exigida en este caso porque la raza está incluida en la lista de perros potencialmente peligrosos (PPP).
En ese momento no se pudo tomar la primera declaración a la víctima porque cuando los agentes llegaron al domicilio donde se produjo el ataque, el hombre ya estaba de camino al centro sanitario de Compostela.
Hace tiempo que Vilagarcía no registraba un episodio tan grave por el ataque de un perro. A finales del año pasado una viandante recibió un mordisco de un perro que circulaba sin correa por la zona del IES Castro Alobre, aunque no se trataba de un can de raza peligrosa. Valga también registró un caso similar por las mismas fechas, cuando un pastor belga malinois –raza no incluida en la lista de PPP– hirió en un brazo a una mujer que paseaba con su bebé por Setecoros. El menor resultó ileso.