La Policía Nacional y Local se desplazaron a primera hora de la mañana a la Galiña Azul de Carril, donde los piquetes bloquearon los accesos. También acudieron miembros del Servizo Municipal de Emerxencias e Protección Civil, para proceder a la apertura de puertas..

Pudo hacerse a las ocho y media de la mañana, pero los padres que llevan a sus hijos una hora antes, debido a motivos laborales, se vieron abocados a dejarlos de nuevo en casa. Así lo denuncia, precisamente, una de las afectadas, que reclama al Concello y a la Xunta que medien para buscar una solución a este conflicto.

Y es que se trata de una huelga indefinida y temen que lo sucedido ayer se repita. “Que ponga una solución para la conciliación de las familias”, explica una de las madres que ayer se vio obligada a volver con su hijo a casa.

El personal en huelga de las galiñas azuis, así como de los centros de cuidado de mayores dependientes del Consorcio Galego de Igualdade e Benestar, está convocado por la CNT, en rechazo al proceso selectivo para la estabilización de empleo que negocian la Xunta y el resto de sindicatos. Se trata de un conflicto que ya lleva tiempo en marcha, debido ala precariedad con la que fueron cubiertos, en su día, estos puestos.

Una delegación de los representantes sindicales se reunieron hace escasos días con el alcalde, Alberto Varela, y la edil de Igualdade, Tania García. Ambos mandatarios le mostraron el apoyo del gobierno local a sus demandas, al entender que la administración autonómica demuestra un “trato desigual e inxusto” con respecto al que se aplicó en otras comunidades, según indicaron fuentes municipales. Además, Varela y García coincidieron con los representantes sindicales a la hora de señalar como “abusivos” los requisitos para los servicios mínimos de la huelga.