Operarios de la empresa Tragsa retiraron más de 700.000 raíces del cadillo –la especie invasora que ha traído de cabeza a los vilagarcianos estos últimos años– en las obras ejecutadas en el arenal de A Concha-Compostela. Técnicos del servicio de Costas y responsables del Concello –encabezados por el alcalde, Alberto Varela– visitaron el resultado de unas obras que costaron más de medio millón de euros y que están terminadas un mes antes de lo previsto.
Desde Costas incidieron en que los estudios técnicos realizados previamente ya estimaban que esa sería la cantidad de esta especie invasora que se encontraría en la playa. Finalmente, según expusieron, ha sido más. “Estaba previsto realizar un decapado de terreo duns 30 centímetros de profundidade, pero nalgunhas zonas tivo que ser algo máis”, destacaron. De hecho se actuó en una superficie total de 60.000 metros cuadrados y en 15.000 metros cúbicos de arena.
Ahora –tal y como explicaron tanto desde Costas como desde el propio Concello– se realizarán tareas de mantenimiento para evitar que el cadillo (y sus impertinentes pinchos) vuelva a hacer su aparición.
El regidor socialista, Alberto Varela, declaró que a partir de ahora también los servicios municipales estarán pendientes por si aparece de nuevo la planta y poder advertir de ello a Costas. Hay partes del arenal en la que ahora se actuará de forma manual ante la imposibilidad de la maquinaria pesada de llegar a todos los puntos, especialmente aquellos más próximos al paseo marítimo. “É algo co que xa se contaba”, indicó el edil de Turismo, Álvaro Carou. Aunque no hay garantía de que esta especie invasora no vuelva a aparecer en la playa desde el Concello advierten de que “se se volve reproducir hai que erradicala o antes posible”.
La finalización de las obras hará posible ahora que la bandera azul –otorgada por la Adeac a la playa de A Compostela– pueda volver a ondear este verano sin ningún tipo de impedimento.
Varela declaró que “agora que se fixeron estes traballos vese a gran praia que temos, a súa inmensidade”. De hecho aseguró que ya se está en comunicación con Costas para poder establecer en el espacio del arenal que no es habitualmente utilizado por los bañistas elementos de juego y deporte para disfrute de vecinos y visitantes. “Serán elementos que se poderán retirar e que teñen que cumprir coa normativa de Costas”, explicó Varela.
De hecho hay serias dudas de que tanto los elementos de la zona de calistenia como los del parque infantil (este en la zona de A Compostela) puedan ser recuperados tal y como existían hasta antes de las obras.
El alcalde también garantizó que se recuperará la iluminación de todo el paseo marítimo, algo que los usuarios llevan semanas reclamando.
Respecto al ansiado carril-bici Varela indicó que “nós temos un proxecto e unha idea, pero agora xa non depende de nós, dado que ten que ser Costas o que dé o visto bo”.
En todo caso el gobierno municipal ha quedado satisfecho por el resultado de unos trabajos que se han realizado en los meses de verano para evitar la temporada de lluvias. “Agradecemos a comprensión dos usuarios do arenal por ter que convivir coas obras todo este tempo”, recalcó el regidor socialista.