El Festival Internacional Clasclás fue una de las primeras citas que se cayó de la agenda, precisamente por su carácter de punto de encuentro entre músicos de todo el mundo. Sin embargo, la organización (Concello y Conservatorio) decidió no renunciar a hacer de la música clásica una de las protagonistas de la agenda del verano. Y lo hace con una edición más local pero también más abierta.
Todas las actividades serán al aire libre. El Castro de Alobre, convertido en un poblado para la ocasión, con casas separadas de seis plazas, será el primer escenario, el viernes tres de julio. “É un dos espacios naturais e patrimoniais máis importantes e ás veces non o coñecemos porque temos pereza”, explica Rosina Sobrido, directora del Conservatorio. La programación arrancará a las diez de la noche, con una sesión “chill-clásica” a cargo de Carlos Crespo. Media hora después comenzará el concierto de Cristian Silva y Xosé Piñeiro. El evento estará presentado por Xoán Mariño y Erea Hierro y las invitaciones se pueden recoger a partir del próximo miércoles en el Auditorio.
Crespo, Piñeiro y Silva repiten equipo en la sesión de clausura, que será el día 9 en el pinar de A Concha y que servirá como preludio a una nueva edición de Ás Nove na Praia. Ahituvi también tendrá su papel en el festival de música clásica..
Los días 7 y 8 de julio se dedicarán a la combinación entre música clásica y ejercicio. La Fundación de Deportes colabora así en la puesta en marcha de dos actividades: Una sesión de spinning el martes en Praza Galicia y clases de yoga y tonificación el miércoles en A Compostela. Ambas estarán impartidas por monitores de la Fundación y será de 10:30 a 11:15 y de 11:45 a 12:30. Los formularios para participar se pueden descargar de la web del festival o de la del Concello.
Huir del streaming y de las tablets pero también llevar la música clásica a un público más amplio son los objetivos de esta edición.