Tres barbanzanos fueron condenados a finales de esta semana por la sección compostelana de la Audiencia Provincial a penas de 19 a 48 meses de prisión por delitos contra la salud pública en la modalidad de tráfico de drogas. Pero, todos ellos eludirán el ingreso en la cárcel al llegar a respectivos acuerdos con la Fiscalía por los que se les suspende el cumplimiento de dichas penas quedando supeditada a que no delincan durante periodos de tiempo que oscilan entre los dos y cinco años, y en dos de los casos a que sigan tratamientos de deshabituación.

Uno de ellos, cuya identidad responde a las iniciales J.F.R., para el que el 26 de noviembre de 2015 se decretó por parte de un juez su ingreso en prisión provisional eludible mediante fianza de 1.000 euros, había sido detenido un día antes cuando portaba con destino a su venta y distribución un total de 615,7 gramos de cocaína con una pureza del 58,55%, valorada en el mercado ilícito en 48.633 euros si se vende en gramos y o en 82.170 euros si se comercializa en dosis.

En ese individuo concurría el agravante de reincidencia, pues ya fue condenado por tráfico de drogas en dos sentencias firmes del 23 de julio de 2007 y 16 de febrero de 2012 a cuatro y dos años de cárcel, respectivamente, y que quedaron suspendidas cada una de ellas durante cuatro años, periodo en el que no podrá delinquir. La Fiscalía le pedía ahora cinco años de prisión y el una multa de 48.633 euros, además del comiso de la droga y de otros efectos intervenidos. Pero, una conformidad entre el Ministerio Público y el abogado del acusado permitió rebajar la pena a cuatro años, manteniéndose el importe de la multa, con responsabilidad personal subsidiaria de 40 días en caso de impago de la misma. El cumplimiento de la referida pena de cárcel se suspende supeditada a que J.F.R. siga un tratamiento de deshabituación y que no delinca por un periodo de cinco años.

También le quedó suspendida durante un lustro la condena de tres años de prisión a J.M.V.T., en el que la Fiscalía apreció el atenuante de drogadicción, y para ello también deberá seguir un tratamiento de deshabituación u no volver a delinquir en los próximos cinco años. Inicialmente, el Ministerio Público le pedía cuatro años de cárcel y una multa de 5.500 euros, después de que el 19 de agosto de 2019 fue encontrado dormido en el interior de un Opel Insignia estacionado en la Rúa Tenencia de Boiro. Entonces fue identificado por la Policía Local y Guardia Civil boirenses, y le encontraron en un cacheo tres envoltorios que contenían un total de 35,33 gramos en varias piedras de cocaína con purezas de entre el 81,71% y 83.06%, y su valor en el mercado ilícito sería de 2.197 euros, importe al que también se redujo la multa. También se le incautaron 403 euros, que la Guardia Civil sostuvo que procedían de la venta de sustancias estupefacientes.

Y la Audiencia con sede en Santiago condenó a N.R.F. a 19 meses de prisión por tráfico de drogas del tipo atenuado, y multa de 59 euros, quedándole suspendida durante dos años si no reincide en la actividad delictiva. La Fiscalía le pedía inicialmente cuatro años de cárcel y 150 euros de multa tras ser detenida el 21 de septiembre de 2019 cuando fue sorprendida vendiendo a otra persona a cambio de 60 euros tres papelinas de heroína con un peso de 0,132 gramos y una pureza del 20,15% y otras tres de cocaína con un peso de 0.116 gramos y un 86,89% de pureza.