“O Arosa merece estar no máis alto posible porque Vilagarcía merece unha alegría”, sostiene Manolo Abalo ante la posibilidad que tiene el club hoy de redondear una buena temporada con el ascenso a 2ª RFEF. Como no podía ser menos, el año estuvo marcado por diferentes problemas que tuvo que sortear el club. “Os xogadores me din que este é o clube con máis mala sorte no que xogaron”. Después de casi tres décadas esperando un partido como el de esta tarde en A Lomba, solo 700 personas podrán disfrutarlo en directo. “Fastidiame moito deixar a xente fora neste partido, estou desbordado polas peticións. Cando termine este imos a ter que coller unhas boas vacacións”, comenta en relación al estrés de los últimos días por la demanda de entradas.
Después de once temporadas al frente del club, Abalo disfruta de su segundo play-off consecutivo y no esconde su deseo de ascender para complacer a socios y patrocinadores que durante esta década han estado al lado de la entidad. “Somos un pobo comprometido que lle gusta sentirse identificado con cousas como as que representa unha entidade de 75 anos como o Arosa, moita xente é parte disto e síntome orgulloso de que así sexa”, comenta el presidente, cuya agenda en esta última semana ha sido frenética, ya que sigue trabajando para conseguir recursos económicos con los que afrontar los gastos de junio, mes no presupuestado a principio de temporada pero en el que la competición continúa debido al retraso por casos covid en varios equipos.
Abalo espera que “o equipo nos poida facer felices a todos” con el ascenso y pide perdón a todas las personas que se quedaron sin entrada por causas ajenas a la entidad, una vez que no aprobaron el aumento de aforo.