Empiezan las ansiadas obras de reforma del centro social de Vilaxoán, ubicado justo enfrente de la playa de O Preguntoiro. El proyecto -adjudicado hace ya unos meses- ha logrado pasar todas las trabas burocráticas y desde el Concello ya se cuenta con la autorización de Portos (titular de los terrenos en los que se ubica el inmueble) para que la firma que se encargará de la obra pueda actuar con total libertad. En los trabajos -que responden a una demanda histórica de los colectivos que habitualmente utilizan estas instalaciones- se invertirán cerca de 80.000 euros. El Concello confirmaba estos días que esta misma semana los trabajos estarán en marcha. Cabe destacar que esta reforma llega después de que incluso varios gobiernos municipales con colores distintos no viesen satisfecha la demanda vecinal. Y es que, aparte de los problemas de espacio a consecuencia de su deficiente distribución, tenía claros problemas con la cubierta, lo que provocaba goteras en el salón de actos.

El proyecto incluye mejoras en materia de accesibilidad. De hecho se construirá una rampa desde el vestíbuelo. Además se reducirá el espacio que ocupa la cafetería (muy sobredimensionada en la actualidad). De esta es posible la construcción de un pequeño camerino que dará servicio a las actuaciones que normalmente se desarrollan en el salón de actos, que contará también con acceso adaptado.

El proyecto supone una inversión próxima a los 80.000 euros financiados con fondos municipales 

Gracias al espacio que se le gana a la actual cafetería se habilitará un despacho más y una sala de reuniones que darán un importante servicio a los colectivos que a día de hoy utilizan estas instalaciones de titularidad municipal.

Por su parte la cafetería se desmontará y se trasladará a un espacio más pequeño en la fachada principal del edificio con vistas a O Preguntoiro.

La reforma beneficiará sobre todo al Club de Remo, que tiene actualmente unas dependencias muy pequeñas y que ahora se verán ampliadas. Habrá más espacio para el gimnasio y los tabiques de los actuales despachos se echarán abajo para que exista más almacenamiento para las embarcaciones. La actual zona administrativa situada en el bajo se reubicará en un local del primer piso.

Una vez culminados estos trabajos no terminan las demandas, dado que la explanada anexa espera a ser humanizada.