Jorge Otero regresa al Arosa. El técnico de Nigrán toma el relevo de Rafa Sáez y asume el reto de dirigir al equipo vilagarciano en Segunda RFEF. “Este club no es muy partidario de cambios”, empezó diciendo el presidente Manolo Abalo en la presentación de Otero ayer para explicar la decisión de traerlo de vuelta después de tres años. “Apostamos por Jorge porque lo conocemos, sabemos que es buena persona y un gran entrenador”, dijo Manolo Abalo. Desde la dirección deportiva Rafa Sáez también explicó las razones por las que se decantó por su sucesor en el banquillo. “Encaja en todas las condiciones que para mí eran premisa”, dijo Sáez, que ensaLzó la labor del nuevo entrenador en su anterior etapa de dos años en Vilagarcía y también su “legado”.

Para Sáez, Otero “tiene recorrido en el Arosa para seguir trabajando y caminando en la idea de club que hemos ido formando y de la que él ha sido partícipe”. Otra de las claves de la contratación por una temporada de Jorge Otero es que contará con el mismo cuerpo técnico que logró el ascenso junto a Rafa Sáez. “La línea continuista es muy importante en el día a día”, además de las “coincidencias” a la hora de entender el fútbol entre la dirección deportiva y el entrenador. “Es una persona con la que tengo mucha afinidad y con la que hablo de fútbol todos los días, hay mucha conexión”, explicó el director deportivo.

Tras quedarse a las puertas de jugar el play-off en la temporada 2017-2018 con el doloroso partido de Cangas en la memoria de la afición arlequinada, Jorge Otero entrenó al Rápido de Bouzas en Segunda B unos meses y llevaba temporada y media en el Alondras, con el que disputó la fase de ascenso este año. 

En su presentación se mostró encantado de regresar y agradecido por la oportunidad. “Estuve aquí dos años fantásticos, estuve muy a gusto y hubiese seguido si no aparece un equipo de superior categoría”. Aunque su regreso genera división de opiniones en la masa social arosista, el técnico promete “ilusión y mucho trabajo” ante una temporada “apasionante y muy exigente”. En su mensaje a la afición el entrenador incide en que “no tengan ninguna duda de que el equipo va a trabajar y va a ser competitivo, sabemos que habrá momentos de dudas y que sufriremos, pero vamos a afrontarlo con mucha ilusión. Es una temporada para disfrutar porque después de tantos año el club está donde se merece”.

Técnico y director deportivo ya trabajan de la mano para confeccionar la plantilla, que pasa a ser la prioridad ahora. El club anunciará en los próximos días varias renovaciones y también bajas. En cuanto a fichajes habrá que esperar, hay refuerzos muy avanzados pero todavía no firmados. Jorge Otero, en lo que se refiere a la plantilla, comentó que “hay una buena base”. Por su parte Rafa Sáez habla de hacer “un equipo competitivo e ilusionante” en un mercado muy diferente al de Tercera. “Lo más importante estos últimos años es que al Arosa han venido jugadores renunciando a su caché. La ilusión, la ola de ánimo y la efervescencia que se produjo en la afición son elementos motivadores para que los futbolistas se animen a venir al Arosa, que es un club muy atractivo y diferente a otros”. El director deportivo explicó que el entrenador “va a tener una opinión importante” en la composición de la plantilla, en la que habrá “apuestas de club”.

El Arosa manejará una plantilla de “20 activos como mucho”, de los cuales solo 16 podrán ser mayores de 23 años según normativa. En Segunda RFEF es obligado contar con 14 licencias de fichas profesionales, el cupo máximo de fichas son 22 y el plazo para cursar licencias en el mercado de verano es durante julio y agosto, y en el mercado de invierno solo en enero.

La directiva sigue trabajando para fijar un presupuesto en el capítulo de ingresos. “Estamos pidiendo datos a otros clubes y vamos a tener que retrasar un poco la asamblea de socios por este motivo”, dijo el presidente, que espera que las ayudas federativas, de instituciones públicas y de televisión se mantengan en las mismas cuantías de anteriores años en Segunda B.

La liga arrancará el 5 de septiembre. Todavía no hay calendario, pero Jorge Otero, que ayer mantuvo la primera reunión con su nuevo cuerpo técnico, quiere empezar a entrenar en julio “seis o siete semanas antes del inicio”. Además mantendrá el horario de las sesiones diarias a primera hora de la tarde, como instauró Rafa Sáez a su llegada hace tres temporadas.