Jornada de mucha tensión la que se vivió ayer en el campo Novo San Pedro. El Villalonga se jugaba el ascenso a Tercera e hizo su parte: Venció 1-0 al Barbadás. Pero la parte que dependía del resultado de los otros dos partidos aplazados, no se cumplió, y el Villalonga se queda a las puertas.
La tarde comenzó con buenas perspectivas: Héctor marcó para el Villalonga al inicio de la primera parte y el Arnoia (que se medía al Cultural Areas), empezó perdiendo 0-2. En ese momento, ese resultado le valía al Villalonga para ascender. Pero en la segunda parte el Arnoia remontó y acabó venciendo 3-2.
Por otro lado, la polémica también estuvo presente en el otro encuentro aplazado, el Juvenil Ponteareas-Gran Peña. Los segundos se presentaron tan solo con 9 jugadores, debido a las bajas por el covid-19, y realizaron una sentada, negándose a jugar, por lo que el juvenil ganó el partido y asciende.
Al final del encuentro en el Novo San Pedro, era visible la tensión entre equipo y aficionados. Los móviles en la mano eran la tónica, queriendo consultar el resultado de los otros choques. Finalmente se confirmó la peor noticia y eran visibles las caras largas: El Villalonga se queda a las puertas y el próximo año serán equipos de Tercera el Juvenil Ponteareas y el Atlético Arnoia.
Una vez finalizados los encuentros, Ricardo Fernández, entrenador del Villalonga, valoró lo sucedido: “É unha pena, porque tiñamos a ilusión de que se puidera dar, pero estou orgullosísimo do equipo que teño, da entrega que fixeron hoxe. Vaciáronse no campo. Estou moi agradecido polo que me demostraron hoxe. Faltaba moita xente importante e creo que tanto a directiva como a afición teñen que estar moi contentos deste grupo humano”, señaló el técnico.