En alguna ocasión hemos escuchado eso de que los gallegos tenemos el copyright de la emigración. Es raro que alguna familia no tenga algún pariente que tuviera que cruzar el charco o irse a países como Suiza o Alemania. Saber que los registros de salidas a América desde el puerto están guardados y se quieren recuperar nos llena de ilusión, por poder recuperar nuestra memoria.