Un vecino de O Grove de 68 permanece hospitalizado en estado grave en el Álvaro Cunqueiro de Vigo tras sufrir un golpe en la cabeza al ser agredido durante el partido de la Liga Plata fememina de Balonmano que disputaron el domingo los equipos cadetes del Sanxenxo y el Rasoeiro en el pabellón de Vilalonga.
Los hechos sucedieron cuando el árbitro, de tan sólo 15 años y nieto de la persona víctima de la agresión, pitó un penalti y uno de los padres del equipo contrario comenzó a insultarlo. El abuelo del colegiado, que se encontraba en esos momentos en el pabellón, se dirigió a este hombre y, tras un rifirrafe, el agresor lo empujó, perdió el equilibrio y se golpeó en la cabeza. Inconsciente, el 061 lo trasladó al hospital, a la vez que se personó en la instalación la Guardia Cívil para tomar la declaración al agresor. Ya se ha presentado una denuncia por estos hechos en Sanxenxo, destacando que el agresor ya era conocido en el ámbito federativo por comportamientos de esta índole.
Tras estos hechos, tanto la Federación Galega de Balonmano como los clubes ha emitido comunicados para, “en representación de todo el balonmano gallego”, condenar “enérgicamente los lamentables actos de violencia” ocurridos durante este partido. “Manifestamos nuestra absoluta repulsa por la agresión sufrida por un familiar del colegiado, quien con el único propósito de defender el respeto hacia el árbitro y el juego, resultó gravemente herido. Este tipo de comportamientos no tienen cabida ni en nuestras pistas ni en nuestra sociedad”, han manifestado.
Así, desde la Federación han reiterado su compromiso con los valores de respeto, deportividad y convivencia que, recuerdan, “deben regir en todas las categorías, especialmente en el balonmano base, donde los chicos y las chicas deportistas deben ser la única prioridad”.
Asimismo, ha trasladado su “apoyo y solidaridad” a la familia y allegados del colegiado en estos momentos y ha indicado que seguirán en contacto con él para ofrecerle toda la ayuda que sea necesaria.
Además, ha agradecido la “implicación y rápida reacción” del Sanxenxo Balonmán y el Rasoeiro y ha instado a todos los clubs, entrenadores, jugadores y aficionados a trabajar juntos para “erradicar cualquier tipo de violencia de las gradas y de las pistas de balonmano”.
Por su parte, la Xunta condena profundamente los hechos ocurridos y desea una pronta recuperación del aficionado agradedido, a la vez que ha convocado una “Comisión de Control da Violencia” de urgencia que tendrá lugar mañana a las 10.30 horas.
Desde el Concello de O Grove, la corporación ha convocado a los clubes esta tarde a las 20.30 horas en una concentración en señal de repulsa contra los sucedido. “Para O Grove é un momento difícil falar desta cuestión, é unha noticia desastrosa”, explica el concejal de Deportes Kito Parada, que además es un referente en el deporte del balonmano en la zona. “Xa é duro que haxa un enfrontamento entre afeccionados, pero que todas as persoas implicadas sexan da nos vila, máis aínda”.
Parada, que están en contacto con la familia del vecino agredido, espera que se recupere lo antes posible, aunque es consciente de la gravedad de su estado. Lo sucedido ha causado una fuerte conmoción en O Grove. “Isto é preocupante porque vemos que é moi difícil de erradicar a violencia nas instalación deportistas. O que máis preocupa é que prodúcese nun partido de catergorías base con rapaces e rapazas de 14 e 15 anos”.