El Portonovo se coronó supercampeón gallego el miércoles en Balaídos al derrotar al Sofán en la final por 3-2. En el equipo de David Eirín actuaron varios futbolistas muy jóvenes, pero también tres veteranos que parecen tener cuerda para rato. Son el central Iván Renda (36 años), el delantero Hugo Soto (37 años y autor de dos goles) y Dani Abalo (36 años). Este último marcó el tanto de la victoria.
Abalo, tras jugar muchos años como profesional en España, Portugal, Bulgaria, Turquía o Polonia, estableció su residencia en Sanxenxo y sigue disfrutando del fútbol a otro nivel en el Portonovo. "Lo que más ilusión me hizo fue volver a jugar en Balaídos, más que ganar la final", reconoce. Fueron cinco temporadas las que militó en el RC Celta.
En la actualidad trabaja también como secretario técnico de la cantera del Arosa, que se ha convertido en la tercera mejor de Galicia. Y está muy implicado en el Portonovo. "Somos un equipo que podemos ir a más, hay muchos jóvenes que, si las cosas van bien, van cogiendo más confianza. Sabemos que llevamos una buena racha que algún día se acabará y habrá que ver como reaccionamos entonces".
Son seis victorias seguidas en liga, donde el Portonovo ocupa el segundo puesto, y el título de Supercopa, que se suma al de campeón de la Copa Rías Baixas en un año 2023 que empezó con una grave crisis y está acabando a lo grande. "Este título es la guinda a un gran año", reconoce Abalo. El domingo el Portonovo visita al Allariz y despedirá el 2023 en Baltar ante el Barco. Dos partidos para seguir allanando el camino al principal objetivo, que es lograr la permanencia sin pasar apuros.