El Villalonga madruga para cruzar Galicia a lo largo de más de 200 kilómetros y rendir visita al Viveiro en Cantarrana a partir de las 12 horas. Un partido importante para los celestes en su objetivo de estrenar su casillero de puntos. Los locales suman siete al firmar un extraordinario arranque de liga, en el que ganaron a Arteixo y Arosa y vienen de empatar con el Valladares. Tres partidos en los que no encajaron. El equipo de Luciano González quiere empezar a traducir en puntos las buenas sensaciones de juego que está dejando en septiembre. Sobre el papel, los de A Mariña son un rival directo en la lucha por la permanencia, por lo que es el partido ideal para conseguir la primera alegría.

“La semana a nivel de entrenamientos fue espectacular”, reconoce Luciano González. “Veo al equipo muy bien, pese a las derrotas, tanto de ánimo como de juego, aunque hay detalles que mejorar”. Luciano tiene claro que “si seguimos en esta línea los resultados tienen que llegar”. El Villalonga no tiene dudas en cuanto al camino a seguir y tampoco está afectado mentalmente por los malos resultados, algo nuevo para la plantilla respecto a la exitosa temporada pasada. 

Sobre el rival, Luciano comenta que “juega más directo que nosotros y tenemos que estar muy atentos en las segundas jugadas, si vamos allí a competir y a disputar como el otro día ante la Sarriana estoy convencido de que conseguiremos los tres puntos”. Pese al buen inicio del rival. “Lo que realmente me importa es lo que hagamos nosotros”. Luciano pierde al portero Rodri, que la semana pasada ya fue duda hasta última hora y no pudo jugar. Aarón será su sustituto de nuevo bajo palos. La expedición celeste viaja convencida de sus opciones de puntuar en Viveiro porque sus sensaciones son muy diferentes a sus resultados en este primer mes de liga.