Los guardas rurales de la Cofradía de Pescadores de Cabo de Cruz decomisaron la pasada noche un total de 23,56 kilos de almeja japónica a dos conocidos furtivos de la zona, que los habían extraído con rastrillo en uno de los bancos marisqueros de las concesiones del pósito crucense, concretamente en la zona de Xián. Según informaron esos guardapescas, el modus operandi que utilizaban esos dos individuos consistía en extraer el marisco y cuando lograban juntar una cantidad considerable de producto, uno de ellos se dirigía a esconderlo muy cerca de la zona de extracción, junto una arboleda, mientras que su compañero seguía extrayendo marisco. 

Así, ambos estuvieron capturando almejas japónicas durante aproximadamente algo más de una hora, hasta que decidieron salir con las capturas. Fue entonces cuando los guardapescas de la Cofradía de Cabo de Cruz decidieron intervenir. Al percatarse esos dos furtivos sobre la presencia de esos vigilantes quisieron emprendieron la huida, pero los guardas rurales lograron alcanzarlos en la vía pública, donde procedieron a su identificación, siendo entonces cuando comprobaron que se trataba de dos furtivos habituales. Al finalizar la identificación de ambos, se  procedió al decomiso del bivalvo extraído de forma irregular.