El comportamiento ejemplar que estuvieron dando los más jóvenes durante la celebración de las actividades vespertinas incluidas en los San Juerguines, principalmente durante la Festa da Auga y la Olimpiada Pincheira, no tuvo continuidad en la denominada "Festa Rachada" que tuvo lugar en honario nocturno, sobre todo en torno a la medianoche. Fue a esa hora cuando se inició una pelea entre dos o tres personas que se encontraban delante del escenario del pinchadiscos que amenizaba la velada, y que en pocos minutos se convirtió en una auténtica batalla campal con cerca de 40 implicados, entre los que se hallaban familiares y amigos de los que habían iniciado la trifulca.

Según relataron algunos testigos, empezaron a salir despedidos por el aire un buen número de botellas de cristal, además de que algunos de los que participaban en la multitudinaria reyerta recibieron botellazos en la cabeza. De igual modo, la pelea se fue trasladando a otros escenarios del entorno, llegando incluso a desarrollarse en las inmediaciones del puesto sanitario situado en el entorno de las pistas de O Castelo. Varias personas alertaron de lo que estaba pasando y hasta el lugar de los hechos acudieron los cuatro agentes de la Policía Local que estaban de servicio esa noche y, ante la magnitud de los acontecimientos, se solicitó el apoyo de la Guardia Civil, que acudió con otra patrulla.

Uno de los policías locales que medió para tratar de separar a los implicados en la pelea resultó herido, incicialmente en el hombro y el brazo derechos. Además, otras tres de las personas que resultaron heridas fueron atendidas por el personal de la ambulancia cque había ontratada por el Ayuntamiento pobrense para prestar asistencia sanitaria durante esta celebración festiva. Una de esas víctimas, que rondaba la treintena de años, presentaba una brecha en la cabeza fruto de un posible botellazo, mientras que las otras dos tenían heridas en las manos. Además, debido a que ese servicio sanitario estaba saturado, al igual que les sucedía a las ambulancias del 061 que tienen su base en las localidades del entorno por otras incidencias, una chica de entre 25 y 30 años, que presentaba una herida en la cabeza, acudió por su cuenta al Punto de Atención Continuada (PAC) de A Pobra para que la atendieran.

En el momento en que estaban interviniendo los policías locales y guardias civiles para tratar de separar a los implicados en la batalla campal, un varón de unos 40 años cayó desplomado al suelo, al parecer, debido a una agresión de la que fue víctima. Según parece, se encontraba en las inmediaciones del referido puesto sanitario cuando alguien le propinó un puñetazo y quedó inconsciente en el suelo durante aproximadamente un minuto. Se solicitaron los servicios de una ambulancia, aunque finalmente se movilizó al equipo médico del PAC para atender a esa víctima, que fue trasladada a un centro sanitario por la ambulancia contratada por el Concello.

Cuando la situación parecía haberse calmado y ya se habían marchado del lugar los efectivos de las fuerzas de seguridad, en torno a la una de la madrugada se registró un nueva agresión a la altura de la gasolinera del muelle. En un primer momento acudieron los voluntarios de la agrupación local de Protección Civil, que pidieron la presencia de la Policía Local, que se desplazó hasta la zona. Al no poder acudir una ambulancia para atenderlo, pues las que estaban de servicio se encontraban asistiendo otras incidencias, los agentes municipales optaron por trasladar hasta el PAC de la villa en su coche patrulla a la víctima, que sangraba abundantemente por la cara, principalmente por la nariz y la boca. Según relató algún testigo, pudo haberse caído al suelo y una vez allí alguien aprovechó para patearlo de manera reiterada. posteriormente y hasta que acabó la actuación del DJ se registraron, al menos, tres peleas más. Pero, la presencia activa en esa zona de efectivos de la Policía Local y Guardia Civil hasta que acabó la actuación del pinchadiscos hizo que se quedasen prácticamente en escaramuzas y se disolvieron muy rápido.